Detenido por hurto cuando estaba en comisaría por quitarse el localizador

A él y a su pareja les delataron las imágenes del local en el que sustrajeron varios artículos

Iba a responder por un delito en la comisaría de la capital lucense y tuvo también que hacerlo por otro más. Agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (Udev) de la Policía Nacional detuvieron en una infravivienda de la zona de San Roque a un fugado, de 45 años de edad, sobre el que pesaba una requisitoria de un juzgado de Castilla-La Mancha porque se había arrancado de la pierna el dispositivo policial permanente de localización que llevaba puesto debido a que tenía una orden de alejamiento por violencia de género.

Al detenido le acompañó hasta las dependencias policiales su actual compañera sentimental, una joven de 29 años. Cuando la pareja se encontraba en la comisaría, los agentes se percataron de que él y su novia eran los que habían hurtado artículos por valor de 500 euros en una multitienda de la zona de San Roque. Los pillaron con las manos en la masa las imágenes grabadas por los equipos de videovigilancia del establecimiento.

Esta pareja manchega se había asentado en una vivienda de la capital lucense que llevaba años desocupada y que al parecer carecía de los mínimos servicios domésticos. Les prestó el inmueble el propietario de una explotación ganadera a la que iban a trabajar.

Los agentes arrestaron a la joven cuando esperaba en una sala de comisaría a que el detenido, sobre el que pesaba una orden de busca y captura desde hacía más de un mes, declarase por arrancarse de la pierna el dispositivo permanente de localización.

Aunque cometió el error de hurtar unos objetos en un establecimiento que dispone de sistema de videovigilancia, la pareja trataba de pasar desapercibida desde que se había afincado en la capital lucense, según precisaron los agentes que intervinieron en este caso.

Los dos quedaron en libertad, tras prestar declaración en la comisaría, a expensas de tener acudir al juzgado cuando sean citados, en el caso de él tanto por quitarse el localizador que llevaba puesto en la pierna como por el hurto.