La Policía Local no cesa en su empeño de poner coto a las infracciones en materia de seguridad vial que se comenten en Lugo y comenzó esta semana realizando varios filtros de seguridad, que se saldaron con multitud de denuncias, cuarenta de ellas por exceso de velocidad.
Los agentes instalaron un radar móvil en la Ronda da Muralla, en la madrugada del martes, día 7, y sorprendieron a seis conductores que sobrepasaron el límite establecido de 30 kilómetros por hora.
La velocidad máxima detectada en ese control fue de 68 kilómetros por hora -más del doble de lo permitido-, una infracción que le costará al autor una multa de 400 euros y la retirada de cuatro puntos del permiso de conducir.
Ese mismo día, ya por la tarde, la Policía Local instaló otro cinemómetro en la zona norte de la ciudad y denunció a un total de 34 vehículos por superar los 50 kilómetros por hora permitidos en la zona. En ese control, la velocidad máxima detectada fue de 97 kilómetros por hora, lo que acarrea una sanción de 500 euros y seis puntos menos en el carné de conducir.
La velocidad máxima en el control de la Ronda, con límite a 30, fue de 68 por hora
FILTROS. Además de los controles de velocidad, los agentes realizaron varios filtros de seguridad en diferentes zonas de la capital lucense -durante todo el martes y a lo largo de la madrugada de ayer-, en los que detectaron multitud de infracciones. Los agentes sorprendieron a cuatro conductores que circulaban bajo los efectos del alcohol. Dos de ellos fueron imputados por sendos delitos contra la seguridad vial, ya que arrojaron tasas de 0,94 y 0,77 miligramos por litro de aire espirado, respectivamente. Otros dos conductores también dieron positivo en alcohol, pero no superaron la tasa 0,50 miligramos. De este modo, la infracción fue tramitada por la vía administrativa, lo que implica una multa de 500 euros y la retirada de 4 puntos del permiso de conducir.
Los agentes sorprendieron además a varios conductores que no habían pasado la ITV de sus vehículos, otros que tenían el carné de conducir caducado y algunos que no llevaban puesto el cinturón de seguridad. Cada una de estas infracciones está penada con una sanción económica de 200 euros. La Policía Local también sorprendió a un conductor que iba al volante de su coche a pesar de que tenía el carné retirado por pérdida total de puntos. En este caso se le abrieron diligencias por un delito contra la seguridad vial.
En los filtros que realizaron los agentes en la capital lucense también fueron detectados varios conductores que no tenían el seguro obligatorio en vigor. Los turismos fueron trasladados por la grúa al depósito municipal y sus titulares sancionados con 1.500 euros de multa. Los agentes localizaron además un turismo sobre el que pesaba un mandamiento de búsqueda y depósito. El coche fue precintado y trasladado al depósito municipal.
También fue sancionado un conductor por no haber notificado el cambio de titularidad del vehículo y otro por llevar en el coche un perro "sin cuidar de su adecuada colocación para que no interfiriera en la conducción".
