Agentes de la Policía Local de Lugo denunciaron a un vecino de la ciudad que se negó a identificarse y se encaró con los agentes, quienes se habían movilizado porque varias personas aseguraban que había maltratado a su perro. Tal y como confirmó este viernes el portavoz del cuerpo, los hechos ocurrieron en la tarde del pasado viernes, cuando varios ciudadanos llamaron a la Sala del 092 para comunicar que un hombre estaba golpeando a su propio perro en la Rúa Armónica. Según contaban los testigos, esta persona también había increpado a todos los viandantes que le habían recriminado su conducta.
Tras recibir estas llamadas, los agentes acudieron al lugar y localizaron a un hombre que encajaba con las características descritas por los testigos. Esta persona llevaba un can atado con una correa y los policías comprobaron que se encontraba bajo los efectos del alcohol. De hecho, cuando se acercaron para hablar con él, el hombre mostró en todo momento una actitud "irrespetuosa" con los agentes.
Además, a pesar de los requerimientos policiales, el ciudadano se negó a identificarse e incluso intentó abandonar el lugar y eludir la acción de los agentes introduciéndose en el portal de un edificio. Finalmente, tras ser advertido varias veces de que podría ser trasladado a dependencias policiales si no se identificaba, el hombre accedió a facilitar sus datos. Aun así, los policías tramitaron dos denuncias por sendas infracciones a la Ley de Seguridad Ciudadana, una de ellas por la negativa a identificarse, que acarrea una multa de hasta 30.000 euros, y la otra por falta de respeto a los agentes de la autoridad, lo que conlleva una sanción económica de hasta 600 euros.
En cuanto a la actitud del hombre con su perro, los agentes identificaron al animal y comprobaron que se encontraba "en buenas condiciones físicas y bien cuidado", por lo que no consideraron necesario llevar a cabo ningún otro tipo de actuación.