Los delitos telemáticos se disparan en Lugo y el 95% se puede prevenir

La Policía Nacional recomienda no hacer negocios por Bizum ni fuera de plataformas de pago garantizadas y desconfiar de los brokers online ► Advierte de la proliferación de estafas a través de SMS que ordenan pinchar en enlaces y del riesgo que implica el envío de fotografías íntimas
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photo_camera El inspector, Héctor Pérez en su despacho en la comisaría. XESÚS PONTE

Los delitos telemáticos se disparan en Lugo -al igual que sucede en el mundo entero- y atañen a todo tipo de víctimas, desde personas mayores sin estudios hasta jóvenes con formación. Nadie está libre de caer en las garras de los ciberdelincuentes, pero es posible esquivarlos, o al menos intentarlo, si se extreman las precauciones al entrar en contacto con el universo digital, un aspecto en el que incide desde hace tiempo la Policía Nacional de Lugo.

El inspector Héctor Pérez Arias, jefe de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (Udev) de la comisaría lucense -que investiga este tipo de delitos- recalca la importancia que tiene la prevención para hacer frente a las nuevas formas de criminalidad, que irrumpieron en el día a día de los ciudadanos de la mano de las nuevas tecnologías. "Según las estimaciones que realiza el Instituto Nacional de Seguridad, el 95 por ciento de estos delitos son prevenibles, por lo que es muy importante no bajar la guardia".

"Además", explica, "hay que tener en cuenta que estos delincuentes hacen un trabajo previo de ingeniería social y crean una estafa a la medida de cada persona. No hay un perfil de víctima, solo es necesario estar vivo y tener una necesidad, ya sea económica o afectiva, o una ambición de cualquier tipo. Si los delincuentes la descubren, ahí es donde inciden".

Las denuncias que llegan a diario a la comisaría lucense confirman que la ciberdelincuencia afecta a todo tipo de ciudadanos. "Tenemos muchas denuncias de empresas por temas de phising. Los ciberdelincuentes entran en contacto con las firmas por correo electrónico, haciéndose pasar por proveedores o entidades, y se ganan la confianza de la gente. Y cuando ya hay cierta relación de familiaridad, consiguen sus datos bancarios o logran que les ingrese dinero en un número de cuenta. Los empresarios tienen que tener mucho cuidado en sus relaciones comerciales y es fundamental no hacer ningún tipo de transacción económica fuera de las plataformas de pago digitales que ofrecen una garantía. Las estafas por este método afectan también a empresas públicas. En este caso, lo recomendable es que realicen los pagos a proveedores a través de FACe, una plataforma segura creada para emitir este tipo de facturas. Y también es muy importante tener en cuenta que Bizum puede ser útil para utilizar con familiares o amigos, pero no es seguro para hacer negocios".

fraudes. En el caso de particulares, las denuncias se centran mayoritariamente en los fraudes conocidos como carding y smishing. El primero es un método de estafa online por el que los ciberdelincuentes consiguen los datos de la tarjeta de crédito de una persona y hacen compras con ella. El segundo consiste en el envío de un SMS a un teléfono móvil por parte del ciberdelicuente en nombre de una entidad o una administración.

"Por lo general, este mensaje nos dice que pinchemos en un enlace, pero nunca hay que hacerlo, ya que así autorizamos la descarga de un programa en segundo plano que accede a todos los datos de nuestro móvil. Ni Correos, ni los bancos, ni el Sergas, por ejemplo, operan a través de este tipo de mensajes, por lo nunca hay que pinchar ningún enlace. Y ante la duda», insiste, "es mejor que llamemos nosotros a la entidad que supuestamente nos envía el SMS y comprobemos si esa comunicación es real o fraudulenta".

Otra estafa que también es cada vez más frecuente es la relacionada con las criptomonedas. "Muchas veces, a los ciberdelincuentes les sale más rentable una estafa así, que un atraco a un banco. Se hacen pasar por falsos brokers, simulan profesionalidad y le envían a la víctima todo tipo de documentación que parece real. Es lo mismo que sucede también con las falsas tiendas virtuales, que tienen apariencia de legalidad. Es muy importante fijarse en los dominios y consultar las opiniones, sobre todo la cantidad de ellas. Si tiene 20.000 opiniones y 1.000 malas, hay una operatividad, pero si hay solo diez opiniones, hay que desconfiar de esa web".

Y esa misma desconfianza es la que la Policía recomienda tener en las relaciones sentimentales que se inician por internet. "En este caso, cuando las víctimas son mujeres, los ciberdelincuentes se suelen aprovechar de una situación de debilidad, les hacen creer que tienen una relación afectiva y les piden dinero. Conocen hasta tal punto sus debilidades que las víctimas no dudan. En una ocasión, una mujer que se dedicaba a limpiar casas llegó a pedir un crédito para enviar dinero a un supuesto novio. Y cuando las víctimas son hombres, las técnicas que utilizan los delincuentes suelen ser más agresivas. Los convencen para que envíen fotos de contenido erótico a la supuesta novia o amante y luego amenazan con enviarlas a sus familiares y amigos si no les dan dinero. Es lo que se conoce como sextorsión", señala.

La Policía Nacional advierte que nadie está exento de caer en un fraude digital, por lo que insta a los ciudadanos a tener presentes dos conceptos siempre que operen con cualquier tipo de dispositivo: "desconfianza" y "precaución". Y sobre todo, jamás facilitar ninguna clave personal por email ni por teléfono. "La gente", concluye el inspector Héctor Pérez, tiene que pensar que, cuando facilita el acceso a sus dispositivos, está abriendo su caja fuerte".

La Udev contabilizó 1.370 fraudes cibernéticos en tan solo un año

La Unidad de Delicuencia Especializada y Violenta (Udev) de Lugo ha visto incrementado su trabajo de forma exponencial con la irrupción de los criminales en el universo digital. El anonimato que consiguen y la posibilidad de operar a nivel internacional desde su casa convierten el ciberespacio en el lugar ideal para conseguir dinero fácil a costa de la debilidad de las víctimas.

Así, solo en Lugo, la Policía Nacional contabilizó el año pasado 1.370 fraudes cibernéticos, una cifra que intentan rebajar concienciando a la población con charlas en centros escolares y sociales. "Es muy importante que los jóvenes conozcan los riesgos que implica operar por internet y tener conversaciones con desconocidos. Es fundamental ser desconfiado", explica el inspector Héctor Pérez, "y entender que en el mundo digital todo son algoritmos matemáticos y todo lo que vemos y nos cuentan puede ser ficticio. Y no solo los jóvenes, ya que cada vez hay más gente mayor que se maneja en las redes. Cuando vamos a dar las charlas, nos sorprende la cantidad de gente de 70 u 80 años que opera habitualmente por internet".

Además de alertar a la ciudadanía, la Udev de Lugo también realiza ciberpatrullajes a diario para investigar las denuncias que llegan a sus manos y prevenir nuevos fraudes, aumentando así su tasa de resolución. Entre los casos esclarecidos el pasado año figura la detención de un lucense que formaba parte de una red que estafó 4.000 euros a un vecino de Pamplona y 600 a otro de Castellón con transacciones con bitcoins. Los agentes lucenses también investigaron otra estafa similar de 200.000 a dos lucenses que invirtieron en criptomonedas en una plataforma con domicilio en Canarias. Y tampoco se libró de la acción de los ciberdelincuentes el Concello de Lugo, que le giró 200.000 euros a un estafador que se hizo pasar por la aseguradora Zurich. Los investigadores localizaron a otro estafador, vecino de Torrejón de Ardoz (Madrid), que estafó 5.400 euros a una empresa de la capital con el método ‘man in the middle", que consiste en interceptar los mensajes entre la víctima y un proveedor y hacerse pasar por este último.

A lo largo del pasado año, los agentes imputaron por estafa a un hombre que se apropió de 6.000 euros de un lucense con el pago de un altavoz a través de Bizum y a otro delincuente, vecino de Alcoy, que consiguió hackear el móvil de un lucense y envió un mensaje a toda su lista de contactos explicando que estaba atravesando una mala situación económica y solicitando dinero.

También destacó el arresto de un hombre que fue localizado en Ibiza, donde vivía a cuerpo de rey tras clonar la tarjeta de una lucense y estafarle 23.000 euros, y el caso de una sexagenaria de la ciudad a la que un ciberdelincuente suplantó la identidad y utilizó como ‘mula cautiva’ para embolsarse varios créditos exprés por cuantías entre 300 y 500 euros.

Estos casos son tan solo un ejemplo del trabajo que realizan a diario los agentes. "Todo esto pasa en Lugo. No es algo excepcional ni ajeno a nosotros y nadie está libre de convertirse en víctima", señala el jefe de la brigada, "por lo que no nos cansamos de insistir en la importancia que tiene la prevención".

La Policía insta a a denunciar en comisaría cualquier sospecha de fraude o estafa cibernética para poder actuar cuanto antes.

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