La defensa de Ibrahima Ndiaye, el exnovio de Tatiana Vázquez que será juzgado por el asesinato de la joven entre los días 22 y 24 de mayo en la Audiencia Provincial de Lugo, confía en que "el linchamiento" al que ha sido sometido su cliente desde su detención no influya en la resolución del jurado popular que tendrá que emitir un veredicto.
El letrado César Lodos confirmó que la Audiencia Provincial desestimó la petición que había formulado, de nuevo, para solicitar la salida de prisión de Ibrahima hasta la celebración del juicio, algo con lo que ya contaba, reconoció, por la proximidad de la vista oral. El abogado opina que el hecho de que sea "un tribunal no profesional" el encargado de emitir un veredicto, es "un arma de doble filo", una "moneda al aire".
Al tratarse de un caso muy mediático, por las circunstancias de la muerte de la joven, "todo el mundo tuvo acceso al linchamiento al que fue sometido Ibrahima por una de las partes", añadió, pero aun así, "hay una parte de la población que tiene sus dudas".
A falta de apenas dos semanas para que comience el juicio, el letrado solo espera que "se haga justicia", además de reconocer que la proximidad de la vista oral hace que su cliente esté "bastante más animado", dado que está "convencido" de que saldrá en libertad porque "no tuvo nada que ver".
El ministerio fiscal solicita para Ibrahima Ndiaye, de origen senegalés, una pena de veinticinco años de prisión por el delito de asesinato, además de otros dos años y medio de reclusión por violencia en el ámbito familiar. El juicio se celebrará con jurado popular, de modo que la Audiencia Provincial ha convocado a las partes para la elección de sus miembros a primera hora del mismo día 22 de mayo, antes del inicio de la vista oral.
El cuerpo de Tatiana Vázquez apareció cosido a puñaladas -alrededor de cincuenta- en el interior de su propio coche el 9 de abril de 2016, en San Fiz, en la zona sur de la ciudad de Lugo, en un lugar en el que no hay viviendas cerca.
