Llegó a su domicilio, vio a su mujer con otro hombre y se enfrentó a él sin pensárselo dos veces. El agresor reconoció este lunes los hechos ante el titular del Penal número 2 de Lugo y aceptó una multa de 720 euros, una condena bastante inferior a la que solicitaba inicialmente la Fiscalía, que pedía 21 meses de cárcel.
Según quedó recogido en el escrito de acusación del ministerio fiscal, el acusado llegó a su casa el 1 de noviembre de 2017, sobre las nueve de la mañana, y vio a su mujer con otro hombre. La acusación pública explica únicamente que el acusado se encontró a su esposa "en compañía" de otro varón y montó en cólera. De hecho, se acercó a él y comenzó a propinarle golpes por todo el cuerpo.
Como consecuencia de la agresión, la víctima sufrió una rotura en la cara -concretamente en el arco cigomático izquierdo-, así como la pérdida de un diente. El herido tuvo que recibir asistencia médica y tardó 45 días en recuperarse de sus lesiones.
El agresor fue detenido y acusado de un delito de lesiones, por el que se enfrentaba a una condena de un año y nueve meses de cárcel. Sin embargo, este lunes confesó los hechos ante el juez y su abogado alegó que el hombre actuó movido por un estado de arrebato. Finalmente, el fiscal le reconoció la atenuante de arrebato y obcecación y rebajó su petición de condena a cuatro meses de multa con cuota diaria de 6 euros.
Además de los 720 euros de multa, el acusado tendrá que indemnizar a la víctima en 3.979 euros -por las lesiones y las secuelas- y al Sergas en un total de 1.179 euros por la atención médica que le prestó al herido tras el ataque.
MALTRATO. Otro hombre reconoció este lunes ante el mismo juez que agredió a su pareja sobre las cinco y media de la tarde del 8 de julio de 2016. El acusado, que se encontraba con la mujer en un bar y había consumido gran cantidad de alcohol, le propinó varios golpes en un brazo, al mismo tiempo que la insultaba. Además, le estuvo dando collejas durante un buen rato y le escupió.
El fiscal pedía inicialmente para el hombre una condena de un año de prisión, pero las partes llegaron a un acuerdo y aceptó 80 días de trabajos en beneficio de la comunidad. Además, no podrá aproximarse a la víctima ni comunicarse con ella durante dos años.
El Penal 2 celebró también este lunes por la mañana una vista contra un hombre acusado de acudir al domicilio de su ex, ubicado en la capital lucense, sobre las ocho de la mañana del 14 de junio de 2015 y llamar al telefonillo varias veces.
La mujer no le respondió, por lo que el hombre la llamó por teléfono y comenzó a insultarla y a decirle que bajara a la calle, que la iba a matar. A raíz de este incidente, el juzgado dictó una orden de alejamiento que le prohibía aproximarse a la víctima o comunicarse con ella por cualquier medio.
El hombre fue acusado de un delito de amenazas leves y otro delito de vejaciones injustas, por los que el ministerio fiscal solicitó para él nueve meses de cárcel y veinte días de localización permanente. La acusación pública pide también que no pueda aproximarse a la víctima en dos años. El juicio quedó visto para sentencia.
