Una vez allí, el hombre manipuló la caja de cambio, forzó el cajetín y se apoderó de la recaudación, que ascendía a 80 euros. Además, causó diversos daños en la máquina, aunque su propietario no reclamó ningún tipo de indemnización en el procedimiento porque ya había sido indemnizado por la compañía aseguradora.
Por estos hechos, el acusado fue condenado como autor de un delito de robo con fuerza en las cosas, con la agravante de reincidencia, ya que tenía al menos otras tres condenas anteriores por hechos similares. El juez le aplicó también la atenuante de drogadicción, al considerar que actuó "afectado por su dependencia al consumo de estupefacientes".
El acusado recurrió la condena, pero la Audiencia de Lugo confirma la sentencia y explica además que el dueño del establecimiento aportó las grabaciones de las cámaras de seguridad, en las que la identificación del acusado "resulta inequívoca". La sala considera que la calificación de los hechos que hizo el juez es "correcta", por lo que confirma la condena de dos años de prisión para el acusado.