La Audiencia Provincial de Lugo impuso una multa de 360 euros a un joven que pagó en un locutorio de la capital con billetes falsos de 50 euros e intentó abonar unas cervezas con una tarjeta de crédito que no era suya.
La sentencia considera probado que el 26 de noviembre de 2020, alrededor de las once menos cuarto de la noche, el joven acudió a un locutorio 24 horas de la Rúa Mallorca y cogió unas cervezas. El chico pagó en la caja con un billete de 50 euros y el empleado le dio 38 euros de vuelta. El acusado se marchó del establecimiento, pero regresó poco después y cogió más cervezas, que intentó pagar con otro billete de 50 euros. Sin embargo, en esta ocasión, el trabajador le pasó el rotulador para billetes falsos y detectó que el dinero no era auténtico, por lo que dejó las bebidas y se marchó.
El acusado volvió ese mismo día al locutorio e intentó pagar las cervezas con una tarjeta, pero el terminal no aceptó la operación. Tal y como explica el juez en el fallo, la tarjeta que trató de utilizar el joven había sido perdida por su titular unos días antes.
Por estos hechos, el juzgado de Instrucción número 2 de Lugo condenó al acusado como autor de un delito leve relativo a la falsificación de moneda y otro de estafa. El chico fue condenado únicamente en base al artículo 386.3 del Código Penal –que castiga "a quien, habiendo recibido de buena fe moneda falsa, la expenda o distribuya después de constarle su falsedad"–, ya que el juez entiende que no quedó acreditado que el chico participase en el proceso de falsificación.
Aun así, el letrado de la defensa recurrió la condena ante la Audiencia Provincial de Lugo alegando que el joven desconocía la falsedad de los billetes, pero el tribunal confirmó el fallo. "No solo empleó un billete de 50 euros en una primera ocasión, sino que –y a pesar de que recibió 38 euros de cambio por las compras que hizo– regresó al poco tiempo a pretender pagar nuevamente unas cervezas con otro billete falso, por lo que la conclusión alcanzada por el tribunal es que el joven era conocedor de la falsedad de los billetes y los usaba para realizar pagos teniendo tal conocimiento", concluye.
El juzgado de instrucción 2 de Lugo le había impuesto al joven una multa de 270 euros por distribuir moneda falsa y otra de 180 euros por intentar cometer una estafa con una tarjeta que no era suya. La Audiencia confirmó el fallo, pero rebajó la segunda multa a 90 euros.
Indemnización
Además de la multa impuesta por distribución de moneda falsa y estafa, el acusado tendrá que indemnizar al responsable del locutorio en la cantidad de 50 euros, por el billete que consiguió colarle.
