Un ciudadano de Lugo fue condenado este lunes a 12 años de prisión tras reconocerse autor de la agresión sexual a una niña de 13 años, nieta de su pareja y que lo consideraba como su propio abuelo. El hombre, que declaró por videoconferencia desde prisión, había aceptado previamente los hechos de los que se le acusaba y pudo ver rebajada así la petición de la Fiscalía, que solicitaba al principio 14 años de cárcel.
En la vista celebrada en la Audiencia Provincial, la Fiscalía expuso que el acusado inició a principios de 2008 una relación estable con su pareja, que en 2007 había tenido una nieta. Fruto de un contacto tan permanente y familiar, la propia niña lo llamaba "abuelo".
El día 6 de septiembre de 2020, "después de la celebración de una comida familiar, insistió en ser él quien llevara a la niña, que entonces tenía 13 años, de vuelta al domicilio de sus padres". Sin embargo, "llevó a la menor a su domicilio, donde convive con su madre nonagenaria, con el pretexto de que tenían que recoger unas cosas. Dentro de dicho domicilio, el procesado llamó a la niña para que fuese a su habitación, donde la menor lo encontró vestido solo con unos calzoncillos. La sentó, le quitó toda la ropa y se le echó encima, agarrándola con fuerza e impidiendo que se moviese mientras ella le daba patadas".
Según el escrito de causación, el acusado "le introdujo un dedo en la vagina, la obligó a practicarle una felación y la penetró. Durante la penetración, la víctima gritó y pidió ayuda, pero el procesado le dijo que se callase si no quería que la atase con un cinto".
Por todo ello, el hombre fue condenado a 12 años de prisión más otros 10 de libertad vigilada cuando cumpla la condena. También deberá indemnizar a la víctima.
