Una lucense, con iniciales M.S.A.R., fue condenada a un año de prisión por llevarse varios muebles de un piso tras ser desahuciada. Según explica la sentencia, en diciembre de 2014, la mujer empezó a ocupar como inquilina una vivienda de la calle Pintor Villamil, de la que fue desahuciada en enero de 2016 "por incumplimiento del acuerdo alcanzado por las partes".
Sin embargo, antes de la fecha del lanzamiento, la acusada, "con ánimo de obtener un beneficio económico", se llevó de la vivienda arrendada diversos muebles, "que incorporó a su patrimonio". En concreto, la mujer se apropió de un mueble de entrada con espejo, una mesa de cocina, una lavadora, una escalera de mano y un horno microhondas, tasado todo ello en 678 euros.
La mujer recurrió la condena ante la Audiencia Provincial, pero el tribunal le da "credibilidad" al testimonio del propietario del piso. Además, la sala explica que la versión de este hombre fue corroborada por las declaraciones de un testigo, propietario de la inmobiliaria que gestionó el contrato.
