El Concello y la Xunta anunciaron este viernes que están en disposición de elaborar y firmar el convenio para urbanizar el espacio existente entre el antiguo pazo de Doña Urraca y la muralla, que incluirá una gran plaza pública.
Es un desarrollo urbanístico que promueve el Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS) y que ha sido consensuado con el Concello, que tendrá que modificar el Pepri y además adquirirá varias edificaciones para ponerlas a disposición del IGVS. Son dos anexos del pazo, que serán eliminados para dejar más espacio libre en torno a este, y tres casas de la Rúa Falcón. Estos suelos se incorporarán a la unidad de actuación, que no incluye el pazo, aunque este será rehabilitado en paralelo, según recordó este viernes la Xunta. El proyecto para este está en fase final de redacción, señaló. La última propuesta es crear en él una sede del Centro Galego de Arte Contemporánea.
Ni la Xunta ni el Concello dieron detalles de lo que está previsto edificar en esta zona, aunque la Administración autonómica destacó que se reducirá la edificabilidad inicialmente prevista en favor de la creación de un gran espacio público. Irá pegado a la muralla, en la zona donde se hicieron excavaciones arqueológicas hace años. Estos hallazgos serán musealizados, según indicó el Concello, aunque la Xunta no lo confirmó.
Para llevar a cabo esta actuación urbanística, el Concello tendrá que modificar el planeamiento del casco histórico (Pepri). Utilizará por primera vez, según explicó la alcaldesa, Lara Méndez, una vía rápida que prevé la Lei de Rehabilitación de Galicia aprobada el año pasado.
El Concello tendrá que modificar el Pepri
Esta fórmula habilitará al Concello a expropiar si es necesario, aunque en primer lugar intentará negociar y llegar a acuerdos con los propietarios.
Méndez dio cuenta del acuerdo con la Xunta junto al concejal de urbanismo, Miguel Couto, que negoció directamente el futuro urbanístico de esta zona con el director del IGVS, Heriberto García, durante varios meses.
La alcaldesa lucense explicó que la compensación que el Concello recibirá como corresponde en cualquier desarrollo urbanístico, que es el 10% de la edificabilidad, no será en suelo sino en bajos comerciales y si es posible también en alguna vivienda.
"A nosa intención é destinalas, no primeiro caso, a darlle continuidade ao viveiro a pé de rúa da Tinería e, no segundo caso, a vivendas municipais de aluguer", explicó. "Unha das nosas preocupacións —añadió— e máis nesta zona con tanto potencial pola súa ubicación próxima aos tres Patrimonios da Humanidade e na que estamos a desenvolver un plan de dinamización económico e social, é evitar a especulación e poñer en valor un barrio que está a coller gran impulso".
SOSTENIBILIDAD. El concejal de urbanismo explicó que en el convenio que firmarán el Concello y la Xunta, y que todavía no está redactado, el gobierno local intentará introducir criterios de sostenibilidad ambiental tanto en las edificaciones como en las soluciones urbanas dentro de la estrategia de la ciudad de lucha contra el cambio climático. Recordó que el Concello elaboró un catálogo de soluciones urbanas sostenibles (pendiente de aprobación) dentro del programa Life.
La alcaldesa destacó el acuerdo con la Xunta como "exemplo de traballo entre administracións que procuran o ben común e que parte do respecto do papel que xogamos cada unha e do respecto polo poder de decisión que cada unha ten sobre os bens que son da súa titularidade", afirmó, en alusión al planteamiento de la Xunta en el cuartel de San Fernando (propiedad municipal), donde propuso un cambio de uso (parador) frente al que estaba consensuado (museo gallego de la romanización).
Méndez también destacó que el Concello tardó solo 21 días en dar licencia al IGVS para trabajos de seguridad en el pazo de Doña Urraca. El Concello da prioridad a proyectos de otras administraciones públicas y de particulares que dependen de subvenciones, recordó la regidora.
