El Concello de Lugo recurrirá ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia el informe del Tribunal Administrativo de Contratación Pública de Galicia (Tacgal) que, en junio, dictaminó que los técnicos municipales deberían valorar la oferta económica que había presentado la empresa Cespa al concurso para renovar el contrato del servicio de limpieza de Lugo.
El gobierno local que encabeza la regidora Lara Méndez considera que el organismo dependiente de la Xunta "excedió sus competencias" al evaluar aspectos urbanísticos del pliego de licitación "que obligarían a admitir a una de las seis empresas que fueron descartadas durante el proceso".
Para la administración local, se trata de cuestiones que "no guardan relación" con los asuntos de los que se debe encargar el Tribunal de Contratación y que, además, contradicen el criterio de los técnicos municipales encargados de la gestión urbanística.
Así lo ha subrayado el teniente de alcaldesa y portavoz del Gobierno local, Miguel Fernández, en un comunicado en el que lamenta que las "frecuentes" suspensiones del contrato, paralizado en tres ocasiones en lo que va de año, están retrasando la puesta en marcha de un servicio "esencial".
El gobierno local defiende que actuó "con celeridad" a la hora de atender los requerimientos y entregar la documentación requerida por el Tribunal de Contratación "acreditando siempre la solvencia de los pliegos de una manera impecable tanto desde el punto de vista técnico cómo jurídico".
"Retrasar su entrada en vigor es ponerle freno al progreso y supone un grave perjuicio para Lugo, a nuestro entender, a todas luces injustificable que está impidiendo que el vecindario disponga de un servicio de calidad, adecuado además a las exigencias sanitarias actuales", ha concluído Miguel Fernández.
