La fábrica de la luz es un edificio que lleva años cerrado. Pero las puertas se abrieron finalmente ayer para una visita del grupo municipal del PP, que llevaba años exigiendo entrar al recinto y el martes, tras recorrerlo, aseguró que está "desmantelado".
La formación abrió así una nueva polémica con el gobierno local, que rechazó que exista tal desmantelacimiento y dijo que su propósito sigue siendo musealizar ese espacio, una vez recuperada la titularidad pública.
"Teñen previsto solicitar outra concesión ou pensan abandonalo como abandonalo como abandonaron Lugo?"
La salida del laberinto les costará a los lucenses casi 2,5 millones en indemnizaciones y el viceportavoz del PP, Antonio Ameijide, denunció que "a imaxe do interior desta dotación é desolador, xa que está totalmente baleira de contidos, equipos ou calquera tipo de instalación que debería de haber nun edificio destinado á produción de enerxía eléctrica".
Ameijide insistió en señalar al responsable de la situación: el Partido Socialista. "Non permitiremos que os lucenses asuman o pago derivado das cacicadas socialistas e da irresponsabilidade na xestión", afirmó.
El gobierno replicó asegurando que las afirmaciones del PP sobre el estado del edificio son falsas. "O que se ve é un espazo diáfano e o equipamento técnico, do que no seu día se fixo uso, e que ía ser musealizado", señala.
La segunda reclamación de los populares es que los políticos responsables, y no los ciudadanos, paguen por, la que denominan, una mala gestión. "Que sexan os políticos responsables os que paguen a indemnización que provocaron e que ascende a 2.434.332 euros, un expediente que a día de hoxe non se iniciou polo que todo apunta a que Lara Méndez segue a protexer os seus intereses persoais e os dos seus compañeiros de partido", insiste Antonio Ameijide.
Desde el gobierno local señalan que tras realizar el pago de las indemnizaciones se estudiará si tiene cabida la exigencia de algún tipo de responsabilidad patrimonial con la que defienden que dan cumplimiento al acuerdo plenario alcanzado con el Partido Popular.
"Son tempos e termos que non ditamina o señor Ameijide nin o PP, senón a xustiza. Unha instancia á que eles tamén deben someterse, pero eticamente incompatible á súa vontade manifesta de xerar ruído e toda a distorsión posible sobre a cuestión", dijo el socialista Miguel Fernández.
Adicionalmente, desde el concello declaran que en los próximos meses procederán a la apertura de una consulta pública para aportar propuestas para la instalación. "Todo cando a instalación sexa, de novo, propiedade da administración local e, sempre baixo a premisa de recuperar este espazo para goce da veciñanza ao ser un dos enclaves de maior beleza da capital, o goberno local o integrará dunha forma coherente no conxunto de proxectos cos que Méndez pretende revitalizar a contorna fluvial lucense", explican.
Después de su inaguración en 1894 esta fábrica dejó de usarse tras más de 100 años en funcionamiento. En 2005 se planea convertir la fábrica en una minicentral hidroeléctrica. Se acaba paralizando la concesión por riesgo económico y ecológico.
En 2007 la fábrica se prepara para ser museo y abastecer a unos 71 hogares. El Concello saca a concurso la explotación privada y se concede a la empresa Inca en el año 2008 a cambio de la inversión de 1,7 millones.
Siete años más tarde comienzan las obras. Cuando estas empiezan y afectan al caudal del río, se requiere su paralización. A la par se investigan irregularidades en la concesión del contrato dentro del caso Pokemon. Se acaba rescindiendo el contrato, y Inca pide 2.8 millones de indemnización.
2007: Museo y explotación privada que se saca a concurso
2008: adjudicación para la empresa Inca.
2015: Empiezan las obras.
2016: Paralización de las obras por problemas ambientales.
2018: Inca pide 2.8 millones de indemnización por no poder explotar la fábrica.
Las turbinas habían llegado de Zaragoza y Alemania, y una de ellas incluso gastaba zapatas de madera.
1894. Fue el año que la fábrica de la luz entró en funcionamiento.
