La concejalía de participación y servicios para los vecinos, que dirige la nacionalista Cristina López, tiene previsto reactivar uno de los contratos caducados del Concello, el de los 80 mupis publicitarios en paradas de bus y lugares estratégicos de la ciudad, que pretende además modernizar para que se conviertan en pantallas digitales.
El contrato de los mupis, caducado en 2016, generó polémica desde entonces dado que la concesionaria continúa aprovechando los espacios al renovar la publicidad, pero sin abonar ningún canon a las arcas municipales.
Según pudo saber este periódico, una de las razones del vacío legal que ha aprovechado la empresa tiene que ver con que no hay ningún funcionario responsable de este contrato, que según llegó a denunciar en enero pasado el PP habría generado a la concesionaria en solo dos años una facturación de 1,7 millones de euros.
López asegura que los actuales sistemas digitales permitirían al Concello mostrar información en tiempo real
Ahora los nacionalistas quieren poner fin a esta situación y plantean incluir este contrato junto con el de las pantallas de información que se prevé que sustituyan a los antiguos relojes-termómetro que había en diferentes puntos de la ciudad.
La concejala Cristina López explicó este martes que los técnicos municipales están estudiando cómo vincular ambos contratos y, además, señala que se pretende que los pliegos de condiciones incluyan mejoras tecnológicas para que los mupis pueden modernizarse y convertirse en pantallas digitales para evitar que se tengan que reponer periódicamente como ahora los carteles publicitarios.
López asegura que los actuales sistemas digitales permitirían al Concello mostrar información en tiempo real, además de tener mayor atractivo para las empresas anunciantes, debido a la personalización de las campañas que permite la nueva tecnología.
