«Quedamos olvidados del mundo» decía ayer una vecina de la calle Mestre Méndez a cuya casa no llegará la obra de asfaltado contratada por el Ayuntamiento. Se arregla la mayor parte de la vía, pero se dejan unos 80 metros sin pavimentar porque el Ayuntamiento considera que ese tramo de la calle es privada y que no se puede gastar allí dinero público.
A los vecinos la explicación les ha dejado descolocados y con un sentimiento de agravio. En el tramo que no se asfalta hay cinco casas y varios solares que aún no se han edificado.
En ese tramo de calle hay algunas casas construidas hace décadas y los vecinos siempre pensaron que la calle era pública. De hecho, hay servicios de abastecimiento de agua y de saneamiento que construyó el Ayuntamiento. También el alumbrado lo instaló y lo mantiene el Ayuntamiento. ¿Por qué iba a hacer el Concello todas esas obras si la calle fuera nuestra?, se pregunta una residente, que no deja de subrayar que pagan impuestos igual que el resto de vecinos que sí se verán beneficiados por la mejora del pavimento.
Lo que no hay en la calle son aceras hechas por el Ayuntamietnto. Pero esa carencia es general en toda la vía, ya que fueron los vecinos las que fueron construyéndolas.
Una de las afectadas decía ayer que cree que el quid de la cuestión está en que el Catastro tiene registrada la calle como privada, pero los afectados entienden que es un error y que debería ser el Ayuntamiento quien lo corrigiera y tratara a todos los vecinos por igual.
Asegura que en el propio Ayuntamiento les han dicho que no podrían haber conseguido la licencia para hacer las casas ni la conexión a los servicios públicos si allí no hubiera una vía pública. Con rabia, ayer vieron como las peticiones que llevan haciendo un mes se ignoraban y solo se asfaltaba un tramo de la calle.
