El gobierno local admite que se incurrió en "un error" en la tramitación del expediente urbanístico de la sede que Suplusa, organismo que depende de la Diputación Provincial, tiene en la Praza de San Marcos.
El Concello exigirá a esta sociedad urbanística que presente el certificado de fin de obra y la licencia de primera utilización para que pueda seguir con su actividad administrativa.
El problema se remonta a cuando un grupo de vecinos denunciaron que la cornisa de la cubierta del inmueble que acababa de rehabilitar Suplusa volaba sobre el edificio contiguo, sin que pudiese hacerlo. El Concello le exigió entonces a Suplusa que corrigiese esas deficiencias.
La sociedad urbanística realizó una comunicación previa de inicio de actividad. Entonces la administración local tendría que examinar el inmueble para comprobar si se habían corregido las deficiencias, sin embargo no hizo caso a ese documento. Atribuye el error a que coincidió con la jubilación de un arquitecto municipal.
Esta respuesta del gobierno local se produce a raíz de que un grupo de vecinos presentó un escrito dirigido a la alcaldesa en el que asegura que el número 11 de San Marcos no dispone del certificado de fin de obra, ni de la licencia de ocupación.
Los vecinos aseguran que el gobierno local tiene conocimiento de esta situación "ilegal" desde hace casi seis años, sin que hasta el momento haya tomado medidas correctoras.
