El concejal de urbanismo sostenible, Miguel Couto, firmó este viernes el pago de una indemnización a dos vecinos de Lugo fruto de una sentencia judicial. Entre los dos recibirán 135.214 euros. Se zanja así un conflicto patrimonial que se alargó durante 24 años.
El origen del problema estuvo en la urbanización de la Rúa Alfredo Brañas, que está situada por la parte de atrás del colegio Menéndez Pelayo. En 1994, el Concello aprobó definitivamente el proyecto de expropiación para urbanizar esta calle. Un año más tarde, la corporación acordó excluir del expediente, a instancia de los titulares, varias parcelas, sobre las que se levantaron actas de cesión a favor de la administración local. A cambio, se reservaba a los propietarios el aprovechamiento urbanístico de la futura reparcelación.
Sin embargo, en 2012, al entrar en vigor el actual PXOM, los solares objeto del acuerdo pasaron a clasificarse como sistema general viario en suelo urbano, lo que imposibilitaba que los dueños pudieran ejercer los derechos urbanísticos acordados en la cesión.
Los afectados solicitaron entonces la reanudación del expediente de expropiación forzosa, petición que fue desestimada al entender que era una medida improcedente. La única indemnización posible era mediante indemnización de los daños por la vía de la responsabilidad contractual. "En febrero de 2016 iniciouse o correspondiente procedemento administrativo, que concluíu coa sinatura de agora", explica Miguel Couto.
En 2016, el Concello pagó indemnizaciones en O Carme.
