Una cobaya que tiene crías, juguete del año

Las tiendas de la ciudad llevan casi tres semanas sin tener ejemplares de ese producto. Tampoco se pueden encontrar los tamagotchis, ni en su versión llavero ni la de más prestaciones, u otros juegos de siempre como el Monopoly clásico
La empleada de una juguetería coloca productos en un estante. VICTORIA RODRÍGUEZ
photo_camera La empleada de una juguetería coloca productos en un estante. VICTORIA RODRÍGUEZ

Una cobaya que tiene tres crías se ha convertido, para sorpresa de muchos de los trabajadores de jugueterías lucenses, en el juguete de las Navidades. "Hace por lo menos 20 días que no se encuentra. Aunque lo vuelva a pedir no lo reponen porque está agotado de fábrica", explica Javier Viñas, encargado de Bazar 0,95, sobre Little Live Pets Mama Surprise.

"Hay varios juguetes agotados pero lo que ocurrió con este no pasó con ningún otro, fue visto y no visto", admite María José Díaz, empleada de Din y Don. Coincide María Luisa López, de Juguettos, donde, pese a que lleva semanas sin existencia, "no pasa un día sin que entre alguien a preguntar si lo tenemos". Cuesta entre 80 y 90 euros y, además de las tres crías, incluye la casita. Se recomienda para edades a partir de 4 años.

Otro juguete imposible de encontrar es un clásico que muchos padres ya utilizaron y compran ahora para sus hijos. Como explica Viñas, todos los años se producen esa clase de ‘revivals’ y este le ha tocado a los tamagotchis. El juego japonés consiste en cuidar a una mascota virtual. El tradicional es un llavero con una pequeña pantalla y escasos botones que se deben pulsar para atender las necesidades de la mascota. Hay que alimentarla, darle sus medicinas o jugar con ella a demanda. Tiene un precio de unos 20 euros pero también existe una versión más cara, de mayor tamaño, con una mejor pantalla y funciones como la de hacer fotos que ronda los 60.

Todos reconocen que los juegos de mesa nunca fallan. Por motivos difíciles de dirimir — "a veces puede ser porque un niño juega en casa de otro con ese juego y le gusta"— este año el Monopoly clásico (27,50 euros) resulta muy complicado de conseguir, aunque no algunas de las ediciones de ese mismo producto. López, por su parte, apunta que también es imposible de lograr a estas alturas el Monopoly fútbol, que ha tenido mucho tirón. Otro juego de mesa que ha tenido mucho tirón es Don Listillo, de preguntas y respuestas para jugar en familia.

Los playmobil se siguen vendiendo y algunos de sus clásicos, como la granja o el barco pirata, entusiasman año tras año. Lo mismo ocurre con el futbolín de la misma marca. La Barbie tampoco falta nunca en las cartas de Reyes, pero este año la más solicitada es la Barbie Cutie Reveal, en la que la muñeca, en vez de un vestido convencional aparece con un traje de un peluche. Hay osos polares o ciervos, incluidos en la colección de invierno.

"Para los más pequeños, lo que se está vendiendo muy bien son los juguetes de Bluey", explica Díaz. Se trata de una serie de dibujos animados de Disney que hace las delicias de bebés que aún no usan juegos más complejos.

Las gafas de Alien Vision, que vienen con una pistola para defenderse de extraterrestres colonizadores, o los bolsos de unicornio con ojitos bailongos figuran en las listas que se han hecho llegar a Papá Noel y las que revisarán los Reyes Magos en la noche del 5 de enero.

Las jugueterías asesoran estos días a decenas de padres, tíos y abuelos de niños todavía indecisos, de los que dejan las cartas para el último momento.

Su personal admite que a veces algunos compradores usan las tiendas "como probadores" y después optan por pedir el juguete por internet, no siempre con precios más baratos.

Viñas admite que, cuando vende por internet, se abre a mercados nuevos y da salida a productos que tienen en Lugo menos tirón. "Es curioso, pero quizás porque aquí hay más relación con el rural, se venden más tractores en tienda física y más grúas y excavadoras en tienda online", apunta el encargado. En cuestión de una semana todos esos juguetes, adquiridos por la vía que sea, habrán llegado desde Oriente a todos los niños a bordo de los camellos de Sus Majestades

Comentarios