El cierre de Leclerc el 31 de enero acerca al abismo al centro comercial Abella

El hipermercado era el principal reclamo de la gran superficie lucense, que espera en breve una decisión de los nuevos propietarios

Vista trasera del centro comercial Abella. XESÚS PONTE
photo_camera Vista trasera del centro comercial Abella. XESÚS PONTE

La difícil situación que ya atraviesa desde hace tiempo el centro comercial Abella aún va a empeorar a partir del próximo 31 de enero, cuando cierre el hipermercado Leclerc, el principal reclamo del centro. Según confirmó este jueves el gerente del establecimiento de la firma francesa, Pierre Debés, "no podemos aguantar más. No vemos ningún futuro ni a corto ni a medio plazo". Este cierre supondrá la pérdida de más de 70 puestos de trabajo, de los que más de 40 lo son a tiempo completo. Una situación a la que se ha llegado arrastrado por la gestión realizada por el anterior propietario, Inversiones Abuin, que hace poco llegó a un acuerdo con el Banco Popular para entregar el centro comercial en dación de pago por la enorme deuda que arrastraba.

El Banco Popular, en quiebra a su vez, fue adquirido por el Santander, que vendió Abella, dentro de un paquete de activos inmobiliarios tóxicos, a un fondo de inversión internacional. En estos momentos, la gerencia del centro comercial sigue esperando a que dicho fondo envíe a la ciudad a alguien para presentar los planes de futuro, que podrían pasar por intentar reflotarlo comercialmente o venderlo. No obstante, el propio Debés aseguraba ayer que nadie de la nueva propiedad se ha puesto en contacto con ellos para aclararles la situación. «Lo único que sabemos es que llevan un año cerrando tiendas y ya no podemos aguantar más».

Mientras, Inversiones Abuin, que está en liquidación, sigue negociando con el resto de acreedores, que suman una deuda millonaria. La intención parece ser llegar a un acuerdo que evite su entrada en concurso de acreedores, lo que complicaría aún más la situación.

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