El caudal del río Miño a su paso por Lugo llegó a multiplicarse por más de seis en apenas unos días como consecuencia de las copiosas lluvias que cayeron sobre la provincia en las últimas semanas.
Según indican fuentes municipales, en cualquier caso, el incremento de nivel en ningún momento supuso peligro para viviendas o instalaciones próximas a la orilla.
Esas mismas fuentes indicaron que el pasado 7 de diciembre el caudal del río era de 89 metros cúbicos por segundo, pero solo unos días después, el 13 de diciembre, a causa de las copiosas lluvias, el volumen de agua se disparó hasta multiplicarse por 6,4, con el paso de 574 metros cúbicos por segundo.
Ese día, el nivel del río estuvo creciendo a un ritmo de cinco centímetros por hora, hasta aumentar 1,17 metros de altura.
El caudal del Miño alcanzó su pico máximo el sábado día 14, sobre las 02.00 horas, cuando llegó a 574 metros cúbicos por segundo. Posteriormente, al ir a menos las precipitaciones, estuvo bajando hasta el día 15 de diciembre, cuando comenzó de nuevo a subir.
Este lunes, día 16 de diciembre, el caudal llegó a 517 metros cúbicos por segundo, mientras que este martes a primera hora de la mañana estaba un poco más bajo, en torno a 497 metros cúbicos por segundo.
[El Fluvial, inundado. SEBAS SENANDE]
Valledor reconoció que están pendientes de las previsiones del tiempo, porque el agua estuvo a punto de entrar "en la sala de máquinas", lo que obligaría a cerrar la piscina climatizada del centro.
En declaraciones a Efe, reconoció que "poco le ha faltado", pero que afortunadamente, al menos de momento y a la espera de lo que suceda los próximos días, habida cuenta de que las previsiones anuncian de nuevo fuertes lluvias, no ha sido necesario cerrar la piscina, que sería "lo que más afectaría" al funcionamiento del club.
Por su proximidad al cauce del Miño, el agua del río ha entrado en la "cafetería de verano", que ahora en invierno se utiliza como sala de fitness, explicó, además de inundar los jardines y las pistas de tenis.
