El catamarán de la Diputación lucense que se encontraba en el río Miño, en Lugo, apareció en la mañana de este viernes hundido en la zona conocida como As Illas.
Esta embarcación, con la que se solían hacer rutas turísticas por este cauce fluvial, llevaba unos tres años fuera de servicio.
La crecida del río por las incesantes lluvias de este otoño acabó arrastrando y hundiendo el catamarán, que estaba ya visiblemente escorado antes de hundirse como consecuencia del agua que se había acumulado en cubierta.
La Diputación anunció hace unas semanas que iba a retirarlo para repararlo, pues llevaba meses en mal estado, con la cubierta anegada, con el fin de volverlo a poner en funcionamiento en alguna de las rutas fluviales de la provincia.
El presidente del ente provincial, José Tomé, aseguró que se contrató en los últimos meses a dos empresas, la última el mes pasado, para retirar el catamarán del río, pero no pudieron.
José Tomé reiteró que la embarcación hundida será retirada para trasladarla a la nave que la Diputación tiene en Begonte, en donde evaluarán si se puede reparar o si está tan dañada que no.
CRÍTICAS. El diputado provincial del PP Óscar Poy afirmó que la del catamarán "abandonado por la Diputación" es "la crónica de un hundimiento anunciado".
"Es el momento de asumir responsabilidades y de responder por qué las promesas que siempre hacen los socialistas acaban de la misma forma, en fracaso", sentenció el popular.
