Carmen Figueiras: "Las pequeñas acciones cunden más que grandes proyectos"

Vivió hasta los once años en Lugo y, tras trasladarse a Badajoz, hacer la carrera en Sevilla y trabajar en Salamanca, volvió a Lugo, donde comparte estudio con un socio. Carmen Figueiras preside la delegación lucense del Colegio de Arquitectos de Galicia, cuya ejecutiva gallega también se feminizó
Carmen Figueiras. SEBAS SENANDE
photo_camera Carmen Figueiras. SEBAS SENANDE

Pasó por Badajoz, Sevilla y Salamanca. ¿Cómo ve a Lugo respecto a esos y otros lugares? 
No quiero ser cruel con otros ámbitos. Hay cosas que antes de ser presidenta del colegio me parecía que se estaban haciendo mejor que en otras ciudades en las que he vivido. Las maneras de hacer me parecían más interesantes aquí. Cuando la gente se queja de determinadas formas de proceder de la administración pública yo siempre tengo referentes de otras que lo hacen peor. Pero luego te das cuenta de que aquí hay cosas muy mejorables en la administración local y en la autonómica. 

Uno de sus retos es implicar al colegio en la redacción de concursos públicos, pero lo que hay son recursos de la entidad contra ellos. 
El Coag y el Consejo Superior de Arquitectos buscan hacer entender a las administraciones que la arquitectura es un bien público. Existen varios métodos de licitación pública legales. Uno es el concurso de proyectos, que es anónimo, tiene un jurado específico y está encaminado a la obtención de anteproyectos para actuaciones que revisten una cierta complejidad. Hay muchas actuaciones a nivel público, urbanísticas y arquitectónicas, que creemos que deben entrar ahí. 

¿Se tiene poco en cuenta el criterio profesional? 
Sí. Entendemos que para hacer una buena arquitectura no debe darse importancia a la bajada de honorarios de los arquitectos. En proporción con lo que cuestan las obras públicas son ínfimos. Que un arquitecto proponga bajar 5.000 euros y eso le dé muchísima puntuación yo creo que es un fallo. Hay poca conciencia de que la arquitectura es un bien público. Las administraciones tienen que ser responsables con la manera en que invierten el dinero. Deberían alejarse de esa idea de anunciar las cosas a bombo y platillo y darles una pátina de trabajo bien hecho. Si organizas bien el concurso y das un plazo suficiente probablemente recibas más y mejores propuestas, y en lo global de lo que se tarda en hacer un edificio público, es un tiempo ínfimo. La manera en que se hacen las cosas es lo que marca la calidad final. Cuando te dan mucho tiempo para hacer una propuesta sabes que las intenciones son buenas. 

Cuando te dan mucho tiempo para hacer una propuesta de intervención sabes que las intenciones son buenas

Pensando en el Lugo del futuro, hay quien mira a ciudades como Vancouver y quien mira hacia a urbes históricas como Mérida. ¿A dónde mira usted? 
A la proporción. ¿Cuántos habitantes tiene Lugo? 100.000 y pierde. No pretendamos ver donde no hay, es de sentido común. Yo normalmente veo más cosas bien hechas en las ciudades pequeñas que en las grandes. Pequeñas actuaciones en ciudades pequeñas cunden muchísimo más que grandes proyectos. 

Se están proyectando nuevos desarrollos urbanísticos a pesar de que a Lugo le cuesta crecer y de que hay urbanizaciones sin edificar y zonas poco habitadas. ¿Corremos el riesgo de abundar en esto? 
Me temo que el centro urbano sufriría abandono igualmente. Me preocupa más que se abandonen determinadas ideas porque el carro tire de cosas de nueva construcción. En unas jornadas sobre A Tinería se habló mucho, por ejemplo, de la creación de espacios públicos. A mí me interesa que se hable de eso sin tener que negar búsquedas para generar nuevos espacios, casi como de experimentación, en la ciudad, como el barrio ecológico. 

Hay en marcha tres nuevos proyectos de peatonalización que, a diferencia de otras veces, apenas han generado debate. ¿Es bueno o malo? ¿Qué opina sobre ellos? 
Creo que es consecuencia de que cada día hay una supernoticia y la gente se cansa, porque ves que las cosas no van pasando. Yo hay cosas sobre las que dudo mucho siempre. Las peatonalizaciones tienen consecuencias para el tráfico y eso no te lo resuelve ni siquiera un concurso de proyectos sino la reflexión por parte de muchísimos agentes. Que te vengan con esto cocinado... Si peatonalizas una zona que casi no tiene población residencial, a lo mejor aumentas el tráfico en otra donde vive mucha gente, que no es tan bonita y que necesita más calidad de sus espacios públicos. No es lo mismo decir Calzada da Ponte, por donde pasan muchos coches para ahorrarse tiempo, que Quiroga Ballesteros, cuando ya puedes cruzar el casco histórico a pie. 

San Fernando tiene una escala residencial, pero no sé si en Lugo es rentable un parador; veo una guerra política

¿Se debe hacer una plaza donde está la actual estación de buses? 
Ha habido muchas reflexiones de mucha gente en las últimas semanas bastante interesantes. En el pliego del concurso se dice que la estación se tira sí o sí. ¿En base a qué criterio? Tienes que trabajar con todo ese espacio, donde además quedará una medianera, como si se hubiera hecho una reflexión de lo que va a suponer una plaza. Me parece que es saltarse 350 pueblos. Es una falta de respeto a la ciudad y al Patrimonio de la Humanidad. 

Y en San Fernando, ¿museo o parador? 
Viendo el edificio, no me olvido que tiene una escala residencial y el concepto de parador tiene cierta lógica. Pero desconozco, y no creo que sea la única, si es rentable poner un parador en Lugo. Y luego, había un proyecto de museo que promovía la Xunta y ahora se propone un parador. No lo entiendo. Me parece una guerra política.

La concepción del Rato me parece un acierto, pero veo excesiva la superintervención en él

¿Cuáles diría que han sido los aciertos y desaciertos urbanísticos de Lugo en las últimas décadas? 
Voy a tirar no solo de lo que pienso sino de lo que oigo. La gente valora mucho el casco histórico, el paseo por el centro. A mí particularmente el Rato me gusta mucho, la posibilidad de salir de mi casa andando y llegar a una Reserva de la Biosfera y poderla caminar. El auditorio me parece un edificio interesante. También me gustan el MIHL y la sede de Norvento. Lo que no me gusta es esa superintervención en el paseo del Rato, la del carril-bici particularmente me parece excesiva, me da un poco de pena. Y O Garañón me parece una propuesta ultrafallida que hay que revertir. Lo que no sé es si hay que apostar por una zona verde o puede haber vivienda. 

¿Quién cree que lo hace mejor, la iniciativa privada o la pública? 
La iniciativa pública tiene que ser el ejemplo para lo privado. 

¿Y lo es? 
Yo tengo un concepto muy elevado sobre lo público. Hace poco estuve en Monte Pío y pensaba que no sé si otro presidente de comunidad tiene una vivienda que sea referente de la arquitectura nacional. Esa cosa que te dignifica tiene que estar en un colegio, un hospital, una pequeña plaza o un PXOM. En Portugal se ve mucho porque tiene una escuela muy potente y hay mucho reconocimiento.

Comentarios