Carballo pide "disculpas" y dice que al hablar de la agresión sexual no le quitó "importancia"

El subdelegado del Gobierno en Lugo reitera su "más firme condena a este tipo de actos delictivos" como el ocurrido en el paseo lucense del río Miño
Ramón Carballo
photo_camera Ramón Carballo

El subdelegado del Gobierno en Lugo, Ramón Carballo, ha pedido "disculpas" por sus palabras en relación con la agresión sexual perpetrada en el paseo del río Miño, tanto a la propia "víctima" como a cualquier otra mujer que se sienta "ofendida" por sus "palabras", además de aclarar que, "en ningún momento", quiso restarle "importancia" a ese episodio.

El portavoz del gobierno provincial, Álvaro Santos (PSdeG), anunció que el grupo Socialista solicitará este martes en el pleno de la Diputación la reprobación del subdelegado del Gobierno en Lugo por unas "nefastas declaraciones" que realizó en relación con la agresión sexual que sufrió una vecina de Lugo en el entorno del río.

A juicio de los socialistas, la forma de expresarse de Carballo le restó importancia a este suceso, en el que una mujer de unos cuarenta años fue objeto de tocamientos y de propuestas impúdicas por parte de un extraño que se dio a la fuga ante la resistencia de la mujer.

Carballo aclaró, a preguntas de los medios sobre este suceso, que lo que intentó "explicar" era que no había sido "una agresión sexual con violación", aunque reconoció que esa idea no quedó "bien expresada" en las citadas declaraciones a la prensa. "Insisto, en ningún momento le quise restar importancia a este hecho ni desmentir que se tratase de una agresión sexual, ya que así está considerada en el Código Penal y clasificada en el propio parte de la denuncia recogida por la Policía Nacional", aclaró.

"Quisiera reiterar, además, mi más firme condena a este tipo de actos delictivos, y recordar que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado siguen trabajando para esclarecer este hecho, como también para evitar que se puedan producir otros semejantes", añadió.

Por otra parte, afirmó que este tipo de sucesos son "hechos aislados" en la ciudad de Lugo y en la provincia, aunque cuando se producen, son "rechazados con total firmeza". "Trabajamos sin escatimar esfuerzos, tanto para esclarecerlos lo antes posible, como para evitar que se repitan casos semejantes", concluyó.

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