Bajo el agua, la libertad

'Al agua sin limitaciones' ayuda a través del buceo a chicos con discapacidad

Actividad 'Al agua sin limitaciones'.INTERNET
photo_camera Actividad 'Al agua sin limitaciones'.INTERNET

 La asociación ‘Al agua sin limitaciones’ organiza este sábado, por tercer año consecutivo, una jornada de buceo adaptado en el mar. Esta vez, el destino al que acudirán las familias será Portocelo, donde catorce chicos con algún tipo de diversidad podrán sumergirse en una experiencia en la que se sentirán completamente libres.

Todo lo que los participantes puedan ver como algo muy lejano para ellos, consiguen alcanzarlo en esta actividad

"En la piscina practicamos, enseñamos cosas, pero en el mar disfrutamos del buceo", asegura Alberto Rodríguez, presidente de la asociación. ‘Al agua sin limitaciones’ se creó a finales de 2010 con un objetivo integrador a través del contacto con el agua. La asociación imparte cursos de buceo adaptado a personas con discapacidad en la piscina municipal de Frigsa y organiza una vez al año «un evento especial en el mar como premio a todos los esfuerzos realizados por los asistentes», explica el presidente.

"La evolución es increíble" asegura Alberto Rodríguez, quien reconoce tener un vínculo especial con uno de sus alumnos, Ángel Blanco García, un joven de 15 años con parálisis cerebral. "A pesar de no poder tener con él una comunicación oral, su estado de relajación debajo del agua transmite el disfrute que siente", relata.

El propio Alberto Roríguez se muestra sorprendido ante los cambios en la actitud de los chicos que participan en la actividad de buceo, pues, al entrar en contacto con el agua "se sienten realmente libres".

Todo lo que los participantes puedan ver como algo muy lejano para ellos, consiguen alcanzarlo en esta actividad. Quini García, madre de Ángel y miembro de la ‘Asociación de nais e pais de menores afectados por parálisis cerebral’, ha encontrado, tras diez años de intensa lucha, un camino hacia la felicidad de su hijo.

"No momento no que comezou a bucear houbo un cambio radical. Iso non hai diñeiro que o pague", recuerda. Quini asegura que en el agua muchas de las limitaciones de Ángel desaparecen, "el é moi feliz, síntese libre na auga, un espazo no que todos somos iguais" y agradece al equipo el labor humano que realizan, a lo que Alberto responde: "se lo agradezco yo a ellos por enseñarme la realidad de la vida".