Tras el Brexit, "será como exportar a Suiza"

Aumentan las empresas que exportan, pero baja el volumen de las ventas

En los cuatro primeros meses de este año 386 empresas lucenses, un 16,3% más, comercializaron sus productos en el mercado exterior. Los patronos atribuyen la caída del 30,7% en la facturación a la crisis en los países de destino y no a la incertidumbre política española
La exportadora Vrio Pack
photo_camera La exportadora Vrio Pack

Cada vez son más las empresas de la provincia de Lugo que dan el paso de comercializar sus productos más allá de nuestras fronteras. En los cuatro primeros meses de este año 386 firmas lucenses exportaron, un 16,3% más que en el mismo periodo de 2015, según los datos facilitados por ICEX España Exportación e Inversiones, organismo que depende del Ministerio de Economía y Competitividad.

Esta es una tendencia positiva que ya se viene experimentando año tras año a lo largo del último lustro, coincidiendo con la prolongada crisis económica. En 2011 fueron 428 las empresas que vendieron al exterior y el ejercicio pasado, 666, lo que supuso un crecimiento del 55,6%. Ese aumento, sin embargo, no se tradujo en un mayor volumen de negocio. Entre enero y abril la facturación de las exportaciones de la provincia de Lugo fue de casi 252,7 millones de euros, un 30,7% menos que en el mismo lapso de tiempo del año pasado.

Los empresarios atribuyen esa mengua más a problemas puntuales en los países de destino que a la situación de inestabilidad política de España a raíz de los resultados electorales. "Puntualmente se ha podido reducir en algún mercado, como por ejemplo actualmente en Francia. No creo que haya influido la situación política", afirma el consejero delegado ejecutivo de la CEL, Jesús Quintá.

Explica que en el tejido empresarial lucense "la alimentación tradicionalmente ha abierto frentes, pero hay otros sectores que no exportaban, como construcción, maquinaria o instalaciones que se han incorporado".

Este directivo habla desde su experiencia personal. Su empresa, Alibós Galicia, que tiene su fábrica en Monterroso, en donde trabajan unas 130 personas de octubre a marzo y 45 el resto del año, exporta "más del 95% de la producción fuera de España desde hace más de 30 años".

Su especialidad es la castaña pelada y congelada. A su favor juega, según pone de manifiesto Jesús Quintá, que "España tiene fama de tener productos de alimentación de calidad", lo que le abre muchas puertas.

Tiene presencia en 15 países de tres continentes: Europa, América y Asia. Sus principales clientes son Francia, Suiza, Estados Unidos y Japón. "Una de las claves para que no te afecte la crisis es tener diversificados los puntos de venta. Si no pones todos los huevos en la misma cesta, capeas mejor el temporal", precisa el administrador de Alibós Galicia.

Pese a la crisis, la empresa ulloana, que factura unos 15 millones de euros, ha aumentado en los últimos años "un 20% las ventas gracias a la exportación".

UN CASO ÚNICO. Las diez queserías acogidas a la denominación de origen San Simón da Costa internacionalizan sus productos bajo la misma marca, Magus. "Es el único caso en Europa, del que tengamos constancia, de exportación cooperativa conjunta", afirma su gestora de exportaciones, María Enríquez.

Hace solo dos años que este producto chairego de calidad comenzó a cruzar las fronteras. Hace un mes envió su primer pedido a Filipinas. Esta semana hará lo mismo con Dinamarca, a donde mandará 50 kilos, y este verano se estrenará en Alemania. Suma así estos tres mercados a los cinco en los que tenía hasta ahora presencia, Inglaterra, Bélgica, Francia, Estados Unidos y Japón.

La gestora de exportaciones de esta denominación de origen de Terra Chá explica que la internacionalización de este queso surgió por "necesidad", debido a que "a raíz de la crisis nacional bajó el consumo del este producto como el de otros que no son de primera necesidad".

"La exportación es una solución a la crisis. Es un trabajo lento y se precisa paciencia porque los resultados se hacen esperar", afirma María Enríquez.

ORIENTE MEDIO. Un país tan exótico como el de Emiratos Árabes Unidos fue el primer destino al que exportó Innolact, una empresa de base tecnológica que echó a andar hace una década en los viveros de la Fundación CEL-Iniciativas por Lugo y que ahora está afincada en el polígono industrial de Castro Ribeiras de Lea.

El comercio exterior acapara el 30% de las ventas de esta firma que fabrica quesos en crema y mascarpone, con una facturación de ocho millones de euros y 52 trabajadores. Actualmente exporta a 32 países: Malta, Francia, Holanda, Marruecos, Egipto, Filipinas, China, Estados Unidos, Colombia y Uruguay, entre otros.

Su responsable de internacionalización, Daniel Sineiro, señala que focalizan sus proyectos de futuro "en los diferentes mercados de Europa, Asia y América con diferentes estrategias de producto y canales".

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