Aumentan en un 18% los usuarios del bus urbano desde el cambio de líneas

El número de viajeros en junio aún fue, en cambio, un 26 por ciento inferior a antes del covid
Usuarios del bus, en una de las paradas.
photo_camera Usuarios del bus, en una de las paradas. SEBAS SENANDE

Las líneas de autobuses urbanos de Lugo están recuperando fuelle. Del primer semestre de este año -en el que se subieron al bus 832.755 personas- al del año pasado -cuando se registraron 707.243 usuarios-, hay una diferencia de 125.512 viajeros más, lo que supone, en términos porcentuales, un incremento de usuarios en 2022 de cerca de un 18 por ciento.

Varias pueden ser las variables que influyeron en este aumento de usuarios. La primera de ellas fue el cambio del mapa de buses con nuevas líneas, lo que contribuiría a la ganancia de usuarios en algunas zonas de la ciudad -quizá hacia el Hula y los polígonos industriales de O Ceao y As Gándaras, donde aumentaron los servicios-, aunque hubo otras, especialmente las de la zona rural que vieron reducidos sus viajes y, por lo tanto, lo más probable es que disminuyese también el número de usuarios.

Otro factor que pudo influir en este incremento es el aumento de usuarios derivado de la mejoría sanitaria. La incidencia del covid redujo considerablemente el número de viajeros en 2020 y 2021 en los autobuses urbanos de Lugo, tanto por cuestiones de seguridad sanitaria como también por la repercusión de los Ertes, presentados por numerosas empresas, y la introducción del teletrabajo, lo que influyó en que hubiese menos traslados desde los domicilios hasta los centros de trabajo. De esta forma, en el mes de junio de 2021 fueron 122.294 los usuarios de bus en Lugo y en 2020, solo 97.624.

Algunas de las variables que influyeron en el aumento de usuarios fue la inclusión de nuevas líneas, la mejora sanitaria o el alto precio del combustible

La tercera variable que también puede incidir en el aumento de usuarios del bus urbano en el primer semestre de este año en Lugo es el alza de los precios del combustible y la inflación, lo que puede llevar a algunos lucenses a utilizar el transporte público en lugar del particular con el fin de ahorrar algo de dinero.

PREPANDEMIA. Aunque los datos de usuarios del bus de este primer semestre son halagüeños las cifras que maneja el Concello de este año son aún un 26% inferiores a las de 2018 y años anteriores a la pandemia. Tomando como ejemplo junio, si en este hubo 147.776 usuarios, en 2018 hubo 185.828; en 2017, 160.956, y en 2016, 175.782.

Volviendo a los datos que maneja el Ayuntamiento del primer semestre del presente año, se observa que el número de usuarios del bus urbano en Lugo sube, especialmente, en los meses primaverales. Así, por ejemplo, si en enero de este año el número de usuarios del bus fue de 124.154 y en febrero, de 130.576, en marzo estos números suben hasta 147.560 viajeros; en abril, a 134.990; en mayo, a 147.699, y en junio, a 147.776 personas.

El número de usuario crece especialmente en los meses primaverales

Lo mismo sucedió el año pasado, aunque con la variación de que el mes que registró más usuarios en el primer semestre fue mayo y no junio, como ocurrió este año. De esta forma, en enero hubo 106.013 viajeros; en febrero, 95.289; en marzo, 126.158; en abril, 126.237; en mayo, 131.252, y en junio, 122.294.

Al trabajo, en coche y a la compra, a pie
Los lucenses usan, en su mayoría, el coche para ir a trabajar y lo dejan en casa cuando van de compras. Eso es lo que dice la última Encuesta Estructural a Hogares que hizo pública el Instituto Galego de Estatística (Ige).

En términos porcentuales, algo más de la mitad de los lucenses ocupados (el 59,86 por ciento) utiliza el vehículo privado para ir al trabajo. En cambio, si se trata de ir de compras, algo más de una tercera parte (un 36,23 por ciento) opta por ir a pie, un porcentaje ligeramente superior a los que van en coche (un 36,10).

RAZONES. Las principales razones por las que los gallegos van en coche y no en bus al trabajo son, según la encuesta, por comodidad (en un 53,08 por ciento de los casos), pero también porque no hay servicio o la frecuencia de los buses es escasa (en un 52,01 por ciento).

30 años es la edad a partir de la cual se utiliza el bus urbano en una menor medida para acudir al centro de trabajo.

Por edades, son los trabajadores jóvenes, entre 16 y 29 años, los que más usan este servicio.