El asombro vuelve a Santa Eulalia

El monumento romano, único en Occidente, reabre al público con horario de 10.00 a 15.00, de martes a sábado

"Esto es lindísimo, hermosísimo y es un milagro que se haya conservado y se pueda ver". Con asombro y emoción expresaban este martes María José y José, aragonesa y canario residentes en Madrid, la impresión que les causó el monumento de Santa Eulalia de Bóveda. Llegaron hasta la aldea que acoge el templo romano tras haber visto en Ourense la exposición In tempore Suevorum, que incluye una referencia al monumento lucense. "Esto hay que verlo", se dijeron y, sin dudarlo, pusieron rumbo a la parroquia lucense.

Tuvieron suerte porque este martes el monumento se volvió a abrir -aunque ellos no lo sabían- después de meses sin un horario establecido de visitas, desde que se jubiló el anterior guardés en septiembre. En noviembre asumió el puesto Montse Eimil, ordenanza de la Consellería de Cultura, pero debido a las obras de acondicionamiento que se realizaron en la caseta de información y a los trabajos de conservación en el monumento, hasta este martes no se retomó el esquema ordinario de visitas, que será de 10.00 a 15.00 horas, de martes a sábado, aunque cabe la posibilidad de verlo en horas distintas a estas en el caso de grupos, previo acuerdo con la guardesa. Permanecerá cerrado los domingos, lunes y festivos.

"Quérese darlle a máxima difusión á reapertura para que veña canta máis xente mellor, sobre todo da provincia de Lugo porque é bastante descoñecido a pesar de estar a 12 quilómetros da cidade", indica Montse Eimil, que asegura que buena parte de los interesados llegan de otras partes de Galicia. "A xente que vén aquí valórao moito, veñen moi informados", añade.

María José y José también comprobaron el desconocimiento que hay en Galicia acerca del monumento. "Cuando les dijimos a la gente que conocemos aquí que veníamos a Lugo a ver esto nos decían que no les sonaba de nada, que eso debía de estar en otro sitio. Nadie sabía de su existencia".

Montse, a quien su nuevo destino laboral le apasiona, enseña el templo al detalle a los visitantes. Les explica con entusiasmo que se trata de una construcción tardorromana, única en el Occidente europeo y descubierta a principios del siglo XX por el párroco de Santa Eulalia, aunque su existencia no trascendió oficialmente hasta 1926. No está claro ni su origen ni su función, lo que ha dado pie a diversas interpretaciones y también a muchas leyendas. La tesis que más se ha ido asentando es que estuvo dedicado a las ninfas o a la diosa Cibeles.

Es fácil que, al atravesar bajo el arco de herradura de la entrada -posiblemente el más antiguo de la Península Ibérica-, una se quede deslumbrada por los frescos de las paredes que sostenían la antigua bóveda, con representaciones policromadas de aves domésticas y motivos vegetales. Los de la parte derecha aparecen más vivos, según Montse, porque la humedad en esa pared es mayor. También llama la atención el estanque en piedra bordeado por cuatro columnas, cuyo emplazamiento original no está claro.

Sin embargo, se agradecen las indicaciones de la guardesa para descubrir en las paredes exteriores detalles que podrían pasar desapercibidos, como el relieve que parece representar a dos tullidos y que se debe apreciar muy de cerca para percibirlo, o el de una mujer encinta. Estas inscripciones hacen pensar que el templo estuviera considerado un lugar de sanación o de procuración de la fertilidad.

"Es un sitio muy hermoso y muy especial", dicen, fascinados, sus primeros visitantes de esta etapa antes de retomar su ruta.

La herradura más antigua
Arco de herradura en Santa Eulalia de Bóveda. VICTORIA RODRÍGUEZEl arco de herradura que corona la entrada a la cámara está considerado, con mucha probabilidad, el más antiguo de la Península Ibérica.

 

Relieves de varios danzantes
Varios danzantes en Santa Eulalia de Bóveda. VICTORIA RODRÍGUEZEn los muros exteriores hay varios relieves extremadamente curiosos, varios de ellos de figuras danzantes. En la imagen, mujer danzante encinta.

 

Tuvo otra altura
Muro de una segunda altura de Santa Eulalia de Bóveda. VICTORIA RODRÍGUEZA la altura de la iglesia se conserva un muro que pertenecía a una segunda altura que, se cree, fue construido en una fase posterior sobre el primer edificio semisoterrado.