Aparece en un solar de Santo Domingo un trozo de una gran calzada romana

El pavimento se conserva en muy buen estado y podría integrarse en el hotel que el grupo Dmanán promueve en ese lugar
Restos de una calzada altoimperiales y, a la derecha, del decumano. VICTORIA RODRÍGUEZ
photo_camera Restos de una calzada altoimperiales y, a la derecha, del decumano. VICTORIA RODRÍGUEZ

La excavación arqueológica del solar de Santo Domingo en el que el grupo Dmanán levantará un hotel de cuatro estrellas deparó un hallazgo que no por esperado deja de ser impactante: un trozo de un decumano, una de las calles romanas del eje este-oeste. Son aproximadamente unos ocho metros cuadrados de calzada, formada por piedras de gran tamaño, que presentan muy buen estado de conservación a pesar de que están localizadas a menos de un metro de profundidad.

El hallazgo entra dentro de lo previsto, ya que este decumano, que no es el principal de Lucus Augusti, ya había aparecido en el solar contiguo, que hace esquina con la Rúa Raíña, donde se hizo un edificio de viviendas con garajes que impidió la conservación de los restos arqueológicos. La suerte del trozo de calzada destapada ahora podría ser mejor, ya que fuentes conocedoras del proyecto apuntan a que podría haber predisposición de los promotores del hotel a conservar y exponer al público el hallazgo. "Dende logo a nós o que nos gustaría é que se puidera ver todo iso na entrada do hotel, pero téñennos que dicir como se faría. Hai que ver se é viable tanto económica como técnicamente", explican fuentes del grupo Dmanán.

La excavación fue realizada por la empresa ourensana Terra Arqueos, bajo la dirección de Yolanda Álvarez González; duró aproximadamente un mes y alcanzó todo el fondo del solar, que estaba ocupado por tres casas. La zona arqueológica más interesante es la más próxima a la Praza de Santo Domingo. En ella se puede ver el decumano en toda su anchura, de al menos ocho metros, y un pavimento asociado a este que podría estar relacionado con una especie de plaza pública, según explica el arqueólogo Luis López González.

Por debajo del decumano se documentó otra calzada, contemporánea a un gran edificio probablemente de época altoimperial -antes de la construcción de la muralla- y que quizás formó parte del foro, apunta el arqueólogo. Las estructuras de esa calzada y ese muro son perfectamente visibles en este momento. No así una tumba del siglo VI, que ya fue desmontada, y materiales que fueron encontrados en el terreno, como monedas y fragmentos de cerámica sigilata, como uno que contiene un gran falo en relieve. Todos estos elementos, incluida la sepultura, podrían integrarse si la propiedad del solar opta finalmente por musealizar el conjunto arqueológico.

VALOR. Si así fuera, sería la primera vez que se deja a la vista un trozo tan grande de calzada romana en la ciudad. "Hai cousas por aí, pero con esta contundencia eu penso que non hai nada en Lugo. Sería un exemplo de como se fai unha excavación e se integra nun desenvolvemento urbanístico", explica López González.

Hacia el fondo del solar también apareció algún elemento romano, como una canalización y un trozo de muro. Sin embargo, esa zona está mucho más arrasada, ya que se hicieron dos fosas en época contemporánea y grandes zapatas para los edificios construidos a principios del siglo pasado.

Este decumano ya se documentó y apareció en otras zonas del centro, al igual que otros decumanos menores, de los que se exhumaron retazos en solares de las Rúas Progreso, Raíña, Armañá o Clérigos, entre otras. Lo mismo sucede con el cardo máximo, que era la calzada principal del eje norte-sur de la urbe romana.

El decumano y el cardo se cruzaban en el foro, que se calcula que tenía unos 106 metros de ancho y ocupaba aproximadamente la zona hoy comprendida entre las calles Progreso y Raíña.

HOTEL
El plan inicial, 51 habitaciones

Dmanán cuenta con un anteproyecto para el hotel que proyecta en el solar de Santo Domingo y estaba a la espera de realizar la excavación arqueológica para ver qué aparecía y de esta manera ajustar el proyecto definitivo. El plan inicial era que el hotel tuviera 51 habitaciones, un gimnasio y un patio interior con fachadas vegetales para disponer de más luminosidad.

Cuatro estrellas
La categoría del alojamiento será de cuatro estrellas y hace meses que los promotores ya tenían ofertas de varias cadenas hoteleras. El edificio se levantará en madera contralaminada y se espera conseguir un ahorro energético de entre al 50% y el 70%.