Los residentes del entorno de la Rúa Álamo llevan cuatro años sufriendo una situación de convivencia que califican de "insostenible" por los actos perturbadores que llevan a cabo diariamente un grupo de convivientes que habitan dos casas unifamiliares contiguas. Los vecinos explican que desde ambas viviendas se reproduce durante todo el día música a todo volumen y hay gritos, discusiones y peleas. Hasta hace cuatro meses, según los afectados, este grupo de personas realizaba cada día -en el patio trasero de uno de los inmuebles- hogueras en las que quemaban todo tipo de elementos, desde muebles hasta objetos de caucho que emiten gases tóxicos.
Denuncian, de igual forma, la "pasividad" y la falta de soluciones con la que se encuentran cuando acuden a la Policía o al Concello para tratar de atajar el actual problema de convivencia. Los vecinos manifiestan que, de todas las veces que llamaron a la Policía para que acudan, solo intervinieron en una ocasión y a causa de los gritos de una mujer.
El resto de las veces, los moradores pararon la música al percatarse de la presencia de unidades policiales en la zona y, una vez que estas se retiraban, continuaban con la fiesta a un volumen que impedía el descanso. De hecho, uno de los vecinos perjudicados, explica que los agentes se negaron en todo momento a realizar mediciones del ruido ambiental porque afirmaban que la medición "no iba a llegar a los niveles de ruido necesarios" para que pudiesen levantar un acta de denuncia.
Además, se presume que estas viviendas están conectadas ilegalmente al tendido eléctrico municipal ya que, según cuentan los residentes de la zona, las luces y los televisores solo se encienden cuando comienza a funcionar el alumbrado callejero, manteniéndose iluminado el interior de las casas durante toda la noche.
Por su parte, el grupo municipal de Ciudadanos recogió el testimonio de los vecinos afectados para instar al gobierno municipal a acabar con esta prologanda situación, por el perjuicio directo que supone para la salud, el descanso y la normal convivencia de los vecinos de Albeiros.
Desde la formación naranja, piden que se elabore un plan de convivencia que incluya el refuerzo de la presencia policial y la vigilancia de aquellos inmuebles que, por su situación de abandono, puedan ser susceptibles de ser ocupados de forma ilícita.
