No hace falta irse a Sevilla para echar en falta la Semana Santa. Impacta la visión desangelada de los lugares que, en circunstancias normales, estarían llenos de gente para las procesiones. Superada ya la tercera semana, los datos animan a pensar en una apertura paulatina en poco tiempo. Que no se tuerzan.
La plaza Anxo Fernández Gómez de Lugo, que tal día como este lunes estaría hasta los topes por la procesión de la Virxe da Esperanza, la de los marineros. SEBAS SENANDE
Miluca Real, del extinto Verruga, con pantalla de protección. SEBAS SENANDE