"Estamos asistiendo a una transformación del orden europeo y, de alguna manera, del orden mundial, que alumbró la caída del muro de Berlín y que ha dado las mayores décadas de paz y de prosperidad a Europa". Con esta contundencia abrió el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, la conferencia-coloquio que protagonizó ayer por la mañana en el Eurostars Gran Hotel de Lugo, en el primer Encontros en El Progreso del curso, que este diario organiza en colaboración con Caixa Rural Galega y que presentó el periodista del diario Arsenio Coto. Y subrayó que, "pese a que España, Europa y la Otan no están en guerra", son claves en estos momentos las relaciones internacionales: "A España le irá bien dentro si le va bien fuera".
Primero, la presidenta de El Progreso, Blanca García Montenegro, dio la bienvenida al ministro y justificó su presencia por el conocimiento que tiene de los temas internacionales y también por "por el aval y credibilidad que da su trayectoria". Luego, el senador lucense César Mogo trazó una semblanza de José Manuel Albares,
quien tomó seguidamente la palabra y desgranó su opinión sobre la situación mundial. También contestó las preguntas de los asistentes, un centenar de personas que previamente se inscribieron para presenciar un acto de gran relevancia para Lugo, pues no todos los días se cuenta con un ministro del Gobierno.
El líder de la diplomacia española analizó primero la situación en los frentes ucranianos y alertó a la vez de algo que es una constante desde que empezó el conflicto: la desinformación. Igualmente alertó sobre las consecuencias para Europa de esta situación, "con cinco países fronterizos, lo que ya hizo que dos de ellos, Suecia y Finlandia, cambiasen incluso su estatus de neutralidad porque ese sistema ya no garantiza la seguridad de sus ciudadanos".
"No podemos ser optimistas sobre un fin cercano de la guerra, pese a que en los últimos días ha habido un avance significativo y muy importante de las fuerzas ucranianas, que han retomado ciudades en manos rusas, además en cuestión de horas·, dijo Albares, lo que demuestra que la ayuda que Europa le está dando a los ucranianos y las sanciones a Rusia "están siendo eficaces", además de la "gran dignidad" con la que están combatiendo militares y civiles del país invadido.
Pese a todo ello, el ministro recordó que "Europa siempre tiene que tener una relación con Rusia. Cuando termine la guerra y ésta terminará algún día, Rusia seguirá ahí, seguiremos teniendo una inmensa frontera con ella, y por lo tanto los estados más cercanos seguirán teniendo un contacto muy estrecho". Dijo que la respuesta ahora a Vladimir Putin ahora es "firme y decidida".
En referencia a la relación de China con Rusia y sobre el reciente encuentro de los líderes de ambos países, Albares recordó que el país asiático es miembro permanente del consejo de seguridad de Naciones Unidas y "por tanto esta llamado a defender la paz y la seguridad mundiales. Debe jugar un papel de templanza, precisamente por la relación que tiene con Vladimir Putin y su ascendente sobre él".
En relación con el papel de Estados Unidos, señaló que está respondiendo en consonancia con la UE para intentar que la guerra termine lo antes posible. "Estamos muy alineados la UE y Estados Unidos para poner fin a esta guerra y para devolver la integridad territorial a Ucrania".
Sobre Hungría y otros países del Este, que tienen una relación histórica con Rusia, Albares dijo que este tema daba para otro coloquio a parte: "El gran desafio de la Unión Europea es cómo mantener la unidad y la cohesión. Hay dos parámetros en los que nos movemos. Uno que no todos los estados estamos expuestos de la misma forma a la dependencia rusa ni tenemos los mismos lazos y otro que es que hay una línea que no podemos permitir que se rebase, que es el respeto a los valores que representa la UE como la democracia y las libertades".
Y por último también habló de la crisis energética derivada de esta guerra y de la dependencia del gas ruso: "No podemos someter nuestro bienestar, paz y seguridad a terceros, pese a que seamos una sociedad abierta, por eso la UE tiene que ser cada vez más independiente en términos energéticos y en eso España tiene un papel crucial".
La presencia en Lugo del ministro congregó a personas de diferentes ámbitos, entre los que estaban el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones; la alcaldesa de Lugo, Lara Méndez; el presidente de la Diputación, José Tomé Roca; el presidente de Caixa Rural Galega (copatrocinadora del acto), Manuel Varela; el director general, Jesús Méndez, y el director comercial, José Manuel López Marcos. También la presidenta del Grupo El Progreso, Blanca García Montenegro; la consejera delegada; Blanca de Cora García-Montenegro, y el vicepresidente y consejero editorial, José de Cora, así como lectores y suscriptores del diario lucense.
PRESENCIA EN LUGO. Citando a Machado, dijo que "me quedo con la emoción de las cosas y me olvido de todo lo demás", sobre la presencia de Albares en Lugo.