Una agresión sexual agrava la alarma social entre los vecinos de A Milagrosa

La Policía Nacional investiga el ataque sufrido por una mujer, de unos 30 años de edad, en la mañana del domingo presuntamente por parte de un individuo con el que coincidió en un local de ocio nocturno de este populoso barrio
Una intervención policial en el after de la Rúa Tui. AEP
photo_camera Una intervención policial en el after de la Rúa Tui. AEP

La agresión sexual denunciada en la mañana del pasado domingo por una clienta de un local de ocio nocturno de A Milagrosa ha encendido de nuevo las alarmas en este populoso barrio de la capital lucense.

Son contados por ahora los datos que han trascendido de este nuevo caso contra la libertad sexual, que está investigando la Policía Nacional.

El personal de una ambulancia atendía a la víctima, que se encontraba muy nerviosa y bajo los efectos del alcohol, alrededor de las diez y media de la mañana del pasado domingo en el cruce de las calles Tui y Lamas de Prado.

Al parecer, la mujer, que ronda la treintena, y su presunto agresor coincidieron en un after de la Rúa Tui, a cuyas puertas se suceden los altercados un fin de semana sí y otro también, según denuncian los vecinos de la zona, que han sido además testigos de las constantes visitas realizadas por las fuerzas del orden.

El personal de una ambulancia atendió a la víctima de la agresión sexual

Minutos después de esta agresión, en las proximidades del local, según relataba una vecina, se podía ver a plena luz del día y en plena calle, con pocos metros de distancia, a una pareja mantener relaciones sexuales, a un joven orinar y a otros dos departir tranquilamente mientras apuraban sus consumiciones.

Este es uno de los puntos negros que reclama que se erradique, debido las frecuentes reyertas que se registran los fines de semana, la Plataforma SOS Milagrosa Lugo Norte, que se creó recientemente, según pone de manifiesto su portavoz, Fernando Toubes, con el fin de poner remedio a la "degradación" y "decadencia" que, a su juicio, sufre este barrio.

Una redada policial en una casa okupada de la Rúa Xulia Minguillón. AEP
Una redada policial en la casa okupada de la Rúa Xulia Minguillón. AEP

A Milagrosa no es El Pozo del Tío Raimundo ni Las Tres Mil Viviendas, pero este colectivo en auge, del que ya forman parte unos 80 vecinos y comerciantes, dibuja un mapa con los puntos más conflictivos del barrio.

Los residentes tienen la mosca detrás de la oreja porque en las últimas semanas la esquina de la calle peatonal Pintor Luís Seoane con Xulia Minguillón se ha convertido en una atalaya desde la que recién llegados al barrio observan los movimientos que se producen. Aunque hay bancos de madera, alguno hasta echa mano de una silla de playa para estar más cómodo.

Un vecino fue testigo el pasado viernes por la noche de como un joven se apostó durante un buen rato en esta esquina, junto a otro, tras recibir en plena vía pública de un camello lo que parecía una papelina de droga. Minutos después patrullaron por este punto hasta tres coches policiales, uno detrás de otro, casi sin solución de continuidad.

La esquina de Luís Seoane con Xulia Minguillón que levanta sospechas. EP.
La esquina de Luís Seoane con Xulia Minguillón que levanta sospechas. EP.

A pocos metros se encuentran otros dos puntos que esta plataforma tiene entre ceja y ceja, las casas okupadas de Xulia Minguillón y Yáñez Rebolo. El año pasado la Policía Nacional realizó en el primero de estos inmuebles al menos dos redadas y varias detenciones por tráfico de drogas.

El colectivo de nuevo cuño solicita a las administraciones que comprueben si estas casas reúnen las condiciones de salubridad necesarias ya que en ellas residen varios menores de edad. Si no es así, proponen que realojen a los okupas en viviendas sociales.