Las agencias lloran a mares en tierra

Celebran poder retomar la actividad laboral tras año y medio de parón, pero afirman que la facturación está lejos de alcanzar cifras de 2019
undefined
photo_camera Anuncios de viajes en una agencia lucense. XESÚS PONTE

LA SALVACIÓN del 2021, así se presentaba este verano para muchas agencias de viajes obligadas a cesar su actividad durante un año y medio a causa de la pandemia. Los primeros meses de la época estival parecían tranquilos y, con la vacunación acelerada, perfectos para hacer la primera escapada en mucho tiempo. Sin embargo, la quinta ola cambió el discurso.

"En mayo ya venían los primeros clientes a preguntar, siempre centrados en turismo nacional, sobre todo Canarias y Baleares", explica la directora de Viajes Almar, Marián López Fraga. El sentimiento lo comparten otras compañeras como Natalia Santiago, jefa de oficina de B the travel brand, con la diferencia de que, en su caso, algunos valientes se animan a comprar packs a destinos como el Caribe. Con todo, son casos residuales.

La quinta ola golpeó fuertemente a oficinas como la de Julio Porto, gerente de Porto Viajes, que vio canceladas parte de sus reservas. "Mucha gente decidía el último día que no quería arriesgarse y un 10% optó por no hacer los viajes", comenta. Porto defiende que los lucenses quieren moverse de nuevo pero que las restricciones y los constantes cambios de nivel les "desaniman". López Fraga le respalda: "Viajar requiere seguridad y la situación aún es tensa". A pesar de todo, en Viajes Almar no se han cancelado visitas, algo que es un "motivo de alegría", dice.

Unas más y otras menos, pero todas las agencias de viajes salieron perjudicadas del 2020 y coinciden en ser "las grandes olvidadas". El empujón del verano no termina de reflotar a un sector muy débil que, a finales de año, calcula presentar pérdidas de entre el 50% y 60% respecto al 2019. Pero no pierden la esperanza, porque "cuando estás en el fondo del pozo —refiriéndose a 2020— y subes un escalón, por mínimo que sea, —mención a 2021— ya es motivo de alegría", explica Juan Antonio Rivadulla, presidente de la Asociación Galega de Axencias de Viaxes (Agavi).

En 2020 las cifras no daban. Con restricciones de movilidad y sin vuelos, las oficinas poco o nada tenían que ofrecer a sus clientes. Algunas decidieron no bajar la reja y seguir atendiendo al público a pesar de "ser una gran fuente de pérdidas". Ese es el caso de Almar, que dio servicio a sus clientes desde que finalizó el confinamiento. "Todo lo que hacíamos era cancelar reservas y posponer viajes", explica su directora.

Lugo, sin embargo, vive durante este verano un aluvión de turistas, con cifras de visitantes similares a las registradas en 2019, la mayoría procedentes de Madrid y Cataluña, que ven en Lugo un punto de mucha riqueza cultural.

INVIERNO. Las agencias desconfían de las previsiones de invierno al ser una estación en la que predominan los viajes internacionales, tan temidos en estos momentos. Algunas oficinas aprovecharán el verano al máximo y ya presentan reservas para septiembre, comentan desde B the travel brand.

La vacunación sigue siendo la gran "salvación". Natalia Santiago es optimista: "Si la vacunación se estabiliza en Europa, puede ser que la gente vaya retomando un poco los viajes internacionales", explica. Los viajes de empresa también suponen un empujón importante para las fechas no festivas. "Las empresas necesitan estar en contacto con los distribuidores y poder hablar con ellos cara a cara; quizá este año se recuperen esos viajes", apuntan en Almar.

El Imserso es el gran olvidado. Por el momento las agencias desconocen si la convocatoria llegará a completarse. A pesar de que el margen de beneficio de estos viajes es muy reducido, para oficinas como la de Julio Porto suponen un 20% de los viajes de invierno y sería "un gran alivio" tenerlo.

Comentarios