La Audiencia Provincial de Lugo acogerá el próximo martes el juicio contra cinco personas que en 2010 presuntamente importaron más de media tonelada de cocaína desde Ecuador, que llegó en barco al puerto de Marín (Pontevedra) oculta en dos contenedores de pescado congelado. La droga fue valorada en más de 17,8 millones de euros.
Esta operación contra el narcotráfico la dirigió la que fuera titular del juzgado de instrucción número 3 de Lugo Estela San José, destinada hoy en día en Huelva.
El fiscal solicita para uno de los acusados, en el que concurre la agravante de reincidencia, 13 años de prisión por un delito contra la salud pública, en concurso de normas con otro de contrabando, y 12 años para cada uno de los otros cuatros procesados.
El martes se celebrará el juicio contra los cinco acusados
Los cinco permanecieron en prisión provisional por este caso entre cuatro y trece meses. A finales de 2011 ya estaban todos en libertad.
La investigación policial permitió acreditar, mediante conversaciones y mensajes intervenidos judicialmente, que los cinco acusados mantuvieron reuniones durante el verano de 2010 en varias localidades de Galicia y Madrid con el fin de introducir ilegalmente en España media tonelada de cocaína, utilizando transporte marítimo. Para ello simularían operaciones comerciales de importación de pescado a través de la empresa de congelados de uno de los procesados, J.R.A.D..
La mercancía fue inmovilizada en el pósito por las irregularidades detectadas en el certificado sanitario de origen
El 24 de septiembre de 2010 llegaba al puerto pontevedrés de Marín un buque, que procedía de Guayaquil (Ecuador), que transportaba, entre otros, dos contenedores cargados con escualo y pota/calamar congelados.
CERTIFICADO SANITARIO. La mercancía fue inmovilizada en el punto de inspección fronterizo del pósito debido a las irregularidades detectadas en el certificado sanitario de origen.
En la inspección aduanera se comprobó que uno de los contenedores portaba la mercancía declarada, mientras que en el otro, entre las cajas de calamar congelado, había siete bolsas de plástico y ocho cajas de cartón que contenían en total 508 toneladas de cocaína, que de haber sido distribuidas en el mercado hubiesen generado 17,8 millones de euros.
