Adiós a O Garañón trece años después de que Pilar de Lara lo paralizara

Una máquina empezó a moder la estructura de tres sótanos a la espera de una megaexcavadora que echará abajo las torres, declaradas ilegales en 2011 tras un proceso que tuvo consecuencias políticas y de otro tipo para la ciudad
Una máquina trabaja en la demolición del esqueleto del edificio de o Garañón. SEBAS SENANDE
photo_camera Una máquina trabaja en la demolición del esqueleto del edificio de o Garañón. SEBAS SENANDE

Ahora sí. Una excavadora empezó a derribar O Garañón, trece años después de que la polémica urbanización fuera paralizada por la jueza Pilar de Lara y diera lugar a uno de los episodios más negros del urbanismo lucense del último medio siglo, que tantas consecuencias, políticas y de otro tipo, tuvo para la ciudad.

Una máquina excavadora comenzó este martes a ‘morder’ y a tirar abajo la estructura de los tres sótanos que conformaban el garaje de una de las torres que quedaron a ese nivel de construcción cuando Pilar de Lara mandó parar, en 2010, como medida cautelar al sospechar que había habido prevaricación urbanística. La jueza, que con el tiempo acabaría sancionada y perdería su plaza en Lugo por las deficiencias en esta y otras instrucciones, actuaba tras la denuncia de la Asociación en Defensa do Parque Rosalía de Castro.

Las sentencias anulatorias de las licencias tardarían aún en llegar. La última, del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, se emitió en 2017 y fue en ese momento cuando la alcaldesa, Lara Méndez, decidió renunciar a seguir defendiendo O Garañón e inició el camino contrario, el del derribo.

Llevar a término el expediente de reposición de la legalidad fue un proceso complicado, que encontró reticencias internas, de técnicos que en su día habían participado en el expediente y seguían defendiendo su corrección y que, en útlimo término, veían posible legalizar la construcción. Y, lógicamente, hubo obstáculos también por parte del promotor y de su principal acreedor, el Banco Santander, que pelearon hasta el último momento por detener la demolición.

El camino para que las máquinas empezaran a actuar quedó despejado hace poco más de mes y medio, pero los preparativos, los permisos y hasta la disposición del material necesario demoró el inicio. Y, de hecho, es probable que la parte más espectacular, cuando un brazo articulado de grandes dimensions empiece a echar abajo una de las torres, no se vea hasta la próxima semana.

Se trata de una máquina de 80 toneladas de peso que será aportada por una empresa madrileña y que no llegará a Lugo hasta el viernes, probablemente, ya que hubo un contratiempo con el permiso especial que necesita para ser transportada. Vendrá en tres piezas en otras tantas góndolas, más un cuarto tranporte más pequeño para la máquina machacadora de escombro.

La empresa a la que le fue adjudicado el proyecto y la obra de demolición, la pontevedresa Xestión Ambienal de Contratas, tiene de plazo hasta pasado mediados de agosto para llevar a cabo el trabajo de derribo. A mayores tiene que reponer el estado original de la parcela, para lo que debe rellenar los huecos de los sótanos, cubrir con tierra vegetal y césped e instalar riego. El objetivo es que pase a ser una zona verde de uso público, una prolongación de las cuestas del Parque, aunque para eso el Concello deberá modificar el PXOM y hacerse con la propiedad del terreno. Asegura que están en marcha ambos procesos, aunque no da detalles.

La mole: una L de ocho plantas que son 10

O Garañón iban a ser varias torres pero solo había dos levantadas y los garajes de una tercera cuando De Lara paralizó la obra. Existen, por tanto, dos edificos en forma de L, con sótanos, planta baja, ocho plantas tipo y ático. Aunque  en realidad la altura de uno de ellos es de nueve plantas sobre rasante en la cota más baja y la del otro, de diez.

La parcela tiene 7.926 metros cuadrados y la edificación ocupa 3.663, en la parte más alta, hacia García Portela y el Parque.

La demolición generará 37.796 metros cúbicos de escombro, según la memoria descriptiva del proyecto.

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