Un hombre con iniciales M.C.F. aceptó una condena de dos años de prisión por intentar arrollar a un agente de la Guardia Civil en un control. El acusado reconoció los hechos en el juzgado de lo Penal número 2 de Lugo y llegó a un acuerdo de conformidad con la Fiscalía, que pedía inicialmente una condena de cuatro años de cárcel. Las partes llegaron también a un pacto para suspenderle la pena, por lo que inicialmente no tendrá que ingresar en un centro penitenciario.
Los hechos sucedieron el 22 de abril de 2018, sobre las seis de la tarde, cuando el hombre conducía su turismo por una carretera de la provincia y una patrulla del subsector de Tráfico le dio el alto en un control. Sin embargo, en lugar de detenerse, el conductor aceleró la marcha, "poniendo el peligro la integridad de uno de los agentes, que tuvo que saltar para evitar ser arrollado". De hecho, el turismo del acusado pasó tan cerca del guardia que la linterna con la que hacía señales para que se detuviera impactó contra la luna trasera del coche, "resultando ambas fracturadas".
El conductor fue localizado y acusado de un delito de atentado contra los agentes de la autoridad haciendo uso de vehículo a motor.