Un joven, con iniciales R.A.C.R., aceptó este martes una condena de seis meses de prisión por partirle la mandíbula a un chico que intentaba frenar una pelea a las puertas de una discoteca de la capital lucense. El altercado se produjo el 8 de diciembre de 2016, sobre las cinco y media de la madrugada, cuando un grupo de jóvenes protagonizó una discusión tras salir de un establecimiento. En un momento dado, un joven sujetó al acusado para evitar que se peleara con otras personas —que no fueron identificadas— y recibió como respuesta un fuerte puñetazo en la cara.
Según consta en el escrito de acusación de la Fiscalía, a consecuencia de esa agresión la víctima sufrió una fractura en la mandíbula y tuvo que someterse a una intervención quirúrgica, que consistió en "osteosísteis (fijación de la fractura) en ambos lados mandibulares y en la implantación de miniplacas".
El herido tuvo que estar dos días ingresado en el hospital y tardó un total de 55 días en recuperarse de las heridas que había sufrido por el fuerte puñetazo que recibió.
ACUERDO. Tras el ataque, el agresor fue detenido y el ministerio público lo acusó de un delito de lesiones, por el que solicitaba inicialmente una condena de 18 meses de cárcel. Sin embargo, las partes llegaron a un acuerdo de conformidad y la Fiscalía rebajó su petición a seis meses de prisión.
El acusado se confesó culpable ante la jueza del Penal número 1 de Lugo y aceptó la pena, pero no tendrá que ingresar en un centro penitenciario si no vuelve a delinquir en dos años y si le abona la responsabilidad civil a la víctima, fijada en 3.500 euros. Acusaciones y defensa acordaron igualmente que el acusado pagará dicha cantidad en un total de seis plazos.
