La directora general de Patrimonio Natural de la Xunta de Galicia, Belén do Campo, hizo balance hoy del plan especial que la administración autonómica puso en marcha para acotar la población de jabalíes en el entorno periurbano de Lugo, como consecuencia de la alarma social que había generado su presencia en calles y zonas verdes de la ciudad, pero también a causa de los accidentes de tráfico que provocaron.
En rueda de prensa, acompañada por el delegado territorial de la Xunta, José Manuel Balseiro, y la jefa provincial de Medio Ambiente, Margarita López, precisó que los arqueros que colaboraron con el desarrollo de este plan lograron abatir a once ejemplares en un total de 45 esperas nocturnas.
Entre los meses de marzo y junio, los arqueros avistaron en unas 131 horas de esperas nocturnas a medio centenar de ejemplares en el entorno periurbano de Lugo.
Según un estudio previo a la aplicación del plan de control, en la zona de exclusión próxima a la ciudad de Lugo, en la que hay cinco tecores de caza, la población inicial de jabalíes rondaba los 770 ejemplares, de modo que la “cuota máxima de extracción sostenible” quedó fijada en 231 suidos, una cifra equivalente al 30%.
Los tecores abatieron 152 jabalíes, de modo que en el plan de control había margen para capturar hasta 79 ejemplares, por lo que, tanto Margarita López como Belén do Campo, pusieron en valor el hecho de que la población de esta especie se fue alejando de la ciudad solo con cazar a once suidos, porque “no se trataba de matar por matar”.
Do Campo precisó que “las esperas con arco” fueron la medida más efectiva” y “sin duda se ha mitigado la presencia de jabalíes en las calles y parques de Lugo”.
Menos efectivas fueron en cambio otras medidas, como la de colocar jaulas-trampa en el entorno de la ciudad, dado que en 19 días, entre el 8 y el 26 de marzo, no capturaron a ningún ejemplar, seguramente por su proximidad a la ciudad y al hecho de que los jabalíes detectasen “la presencia del hombre”.
La directora general lamentó que tampoco haya “buenas noticias” en relación con otra medida fundamental para controlar la población de jabalíes, concretamente la que consiste en mantener limpias de maleza las fincas que utiliza esta especie para encamar en el entorno de Lugo.
Recordó que la Xunta de Galicia llegó a enviarle hasta cinco comunicaciones al Ayuntamiento de Lugo, porque entendía que son “necesarias más rozas”, dado que esta “sería una de las medidas más efectivas”.
En lo que llevamos de año, en la provincia de Lugo, los jabalíes han provocado 490 accidentes de tráfico y la Xunta de Galicia ha registrado hasta 1.000 avisos a causa de los daños provocados por esta especie en los cultivos agrarios.
