El verano se presenta como una oportunidad para los lucenses que se encuentran en paro, ya sea por la cantidad de turistas que vienen a la ciudad en demanda de servicios y contribuyen a incrementan la actividad, como por las vacantes que surgen gracias al veraneo de la población ocupada. Sin embargo, la esperanza no siempre se materializa y el panorama en la oficina del Instituto Nacional de Empleo (Inem) en agosto no varía mucho respecto al resto del año. Cada cinco minutos entran decenas de personas para sellar su tarjeta de desempleo o en busca de un anuncio de trabajo que se corresponda con su perfil.
Este es el caso de Amparo Beltram que, con cinco hijos a su cargo y su marido también en paro, se encuentra en una situación muy delicada. «Llevo más de un año buscando trabajo y esperaba «encontrar algo en verano, ya que hay más demandas de empleo en los servicios, pero ni aún así tuve suerte», cuenta. En lugar de un respiro, el estío le trajo un disgusto más, ya que su marido perdió el trabajo hace un mes.
«Por el momento nos hemos ido arreglando, pero con mi marido también en paro y con cinco hijos que mantener, son unas circunstancias muy complicadas», cuenta con voz temerosa. Según explica, la familia no recibe «ningún tipo de ayuda económica».
En una situación similar se encuentra David Jiménez, que va a ser padre por primera vez dentro de unos meses. Sin embargo, ni él ni su esposa tienen trabajo. «Llevo nueve meses en paro, y hasta el momento no ha habido suerte», cuenta. A estas alturas, asegura que le da «igual donde trabajar». David, como muchos lucenses, acude cada día a la oficina del Inem en busca de un anuncio de trabajo al que poder presentarse como candidato, pero «apenas hay ofertas, y eso que estamos en verano», se lamenta.
Carmen López tuvo un poco más de suerte. Trabajó el mes de julio de pinche en el hospital, pero ya está de nuevo sin trabajo. En su opinión «cada vez llaman a menos personas para cubrir vacaciones», indica. Carmen es madre también, y considera que «al tener un bebé es más complicado encontrar trabajo, ya que te limita». Pero no pierde el optimismo. «Soy muy positiva, y espero que esta situación mejore», asegura.
No es fácil para los estudiantes ganar un dinero extra
Son muchos los estudiantes que aprovechan sus vacaciones de verano para ganar un dinero extra, pero la situación no ayuda a conseguir algún trabajo que les permita sufragarse algún capricho al margen de la paga que reciben de los padres.
Con esa intención se acercó Sara Cobo a la oficina del Inem para anotarse como demandante de empleo nada más terminar sus exámenes de primer de bachillerato. «Quería dedicar el verano a trabajar como dependienta en tiendas de ropa o en cualquier otro establecimiento, en algún almacén...», señala Sara, «pero durante estos meses no encontré nada», reconoce.
El curso está a la vuelta de la esquina «y esperaba encontrar algo antes de volver a estudiar», pero no pudo ser, lamenta.
Ocupación: Hay 141.100 personas con trabajo, frente a 18.400 desocupados
La provincia de Lugo registraba a finales del segundo trimestre del 2010 18.400 parados, 1.100 más que en el período anterior, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (Ine). Lugo es la provincia gallega que menos paro registró en el tercer trimestre de este año, seguida de Ourense, A Coruña y Pontevedra.
Según la última Encuesta de Población Activa (Epa), la tasa de desempleo en Lugo es del 11,5% de su población activa, pues aunque tienen 18.400 desempleados, hay 141.100 lucenses que sí están trabajando. Entre los parados, son mayoría los hombres, con un total de 10.800 en situación de desempleo, mientras las mujeres suman 7.600.
En relación al número de habitantes activos (con 16 o más años), A Coruña es la segunda mejor parada, con una tasa de paro del 14,2% y 77.500 ciudadanos sin empleo, frente a 469.500 que sí están ocupados. En Ourense, la ratio de desempleo se eleva al 16,8% (con 23.000 parados y 113.900 trabajando), en tanto que en Pontevedra alcanza el 18,3% y la cifra de parados -la más elevada- 82.800, frente a un total de 369.200 ocupados.
Más hombres
Al contrario de lo ocurrido en el conjunto de España, en Galicia en el segundo trimestre, el paro subió más entre los hombres (700 desempleados más) que entre las mujeres (500 más). Así, de los 201.800 gallegos en situación de desempleo, 103.100 son varones -la tasa de paro de este colectivose elevó al 14,7%- y 98.700 son mujeres, con una tasa del 16,6%.
