El futuro de una pareja de toxicómanos rehabilitados, con una hija de dos años a su cargo, pende de un hilo por culpa de dos juicios que tienen pendientes de la época en la que supuestamente delinquían para conseguir dinero para droga. Si son condenados en ambos procesos posiblemente deberán ingresar en prisión.
La primera de las vistas orales fue ayer. Están acusados de cometer un robo en la iglesia de San Pedro de Soñar a mediados de 2010 y se enfrentan a sendas penas de dos años de cárcel. El ministerio fiscal mantuvo su petición inicial de condena a pesar de que ambos negaron rotundamente los hechos.