Una catedral abierta al mundo

Un momento de la misa de ayer para los peregrinos alemanes. (Foto. Vilariño)
photo_camera Un momento de la misa de ayer para los peregrinos alemanes. (Foto. Vilariño)

Una misa en alemán? Quienes entraron ayer por la mañana en la catedral de Lugo se quedaron sorprendidos al ver que se estaba celebrando una misa en lengua germánica, a la que asistía un nutrido grupo de extranjeros.

Esa misa, a las nueve de la mañana, era algo un tanto excepcional, pero tampoco nada raro. Los alemanes participantes en la ceremonia de ayer eran un grupo de peregrinos y no es extraño que quienes viajan haciendo la ruta jacobea se detengan en Lugo. Tira el patrimonio, pero también el factor religioso.

Suelen avisar con anticipación, a veces con meses de antelación, y no hay problema para que celebren sus misas en Lugo, explicaban ayer en la catedral, donde la sacristana relataba que a los peregrinos la basílica lucense les encanta.

El grupo alemán de ayer, como otros que han pasado en otras ocasiones, viajaba con su propio sacerdote, lo que facilita que las misas se celebren en la lengua de los peregrinos. El cura que se encargó de oficiar ayer incluso viajaba con toda la vestimenta precisa para la ceremonia.

Lo visto en la catedral ayer sorprendió a algunos, pero no vino sino a confirmar que el turismo religioso existe en Lugo y que el tirón del Camino se hace sentir en la capital bastante más de lo que podría parecer a primera vista.

Para los peregrinos, el paso por la ciudad es muchas veces sorprendente y la visita a la catedral les causa muchas veces impacto. Paquita, la sacristana de la basílica, explicaba ayer que «la catedral de Lugo tiene algo muy especial y les gusta muchísimo a los peregrinos». No solo es que sea muy bonita, añadía Paquita, es también que ofrece un ambiente de recogimiento que no se encuentra en otras catedrales, incluida la de Santiago.

Lo curioso es que lo habitual es ver a los extranjeros haciendo fotos dentro de la catedral y ayer fueron ellos los retratados por los vecinos de la capital.

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