Una anciana se desmaya a las puertas del Hula y derivan su atención al 061

Un celador regresa al centro después de acompañar a un enfermo. (Foto: Xesús Ponte/AEP)
photo_camera Un celador regresa al centro después de acompañar a un enfermo. (Foto: Xesús Ponte/AEP)

Acatar el protocolo fue la razón esgrimida por dos trabajadores del punto de información del Hula para no salir a recoger a una mujer que se desvaneció frente a la entrada del hospital. En cambio, emplazaron al hombre que auxilió a la mujer en un primer momento a llamar al 061, un servicio que movilizaría una ambulancia para trasladarla a un centro sanitario. Es decir, al lugar que le quedaba a unos pocos metros de distancia. Por su parte, el gerente del área integrada niega rotundamente la existencia de una norma así y asegura que debe hacerse lo que dicta el sentido común.

Los hechos tuvieron lugar el pasado día 18, a las cinco de la tarde, cuando una anciana se desvaneció frente a la entrada del hospital y fue socorrida por Alberto Fernández Fraga, que entraba en ese momento en el centro, y una pareja de jóvenes. Según cuenta este hombre, la mujer recuperó la consciencia pero seguía muy mareada, de forma que, tras ayudarla a que se sentara en la marquesina del bus situada a escasos metros de la puerta principal del Hula, entraron en el centro para pedir ayuda.

TRÁFICO
Interviene siempre el 061

Si en el caso de una persona que sufra un percance en el entorno del hospital, algunos celadores aseguran no tener claro si deben trasladarla al interior o no, en el de un accidente de tráfico aseguran que debe intervenir necesariamente el 061. Ese personal dispone de la formación y el material para mover a accidentados con seguridad. 

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