Un vertido de Purín, que tuvo su origen en una granja de Bosende, provocó ayer una fuerte contaminación en el río Rato, si bien con el paso de las horas la situación del río se fue normalizando.
El primer avisó de la fuga se tuvo a la 8.50 horas de la mañana y la situación no se pudo controlar hasta las 12.40 horas, de modo que durante ese tiempo se vertieron cientos de litros de purín al cauce.
La Policía Local estimaba ayer que estuvieron llegando entre 20 y 40 litros de purín por minuto al río durante el tiempo que duró el vertido. Sin embargo, el momento exacto en el que empezó a producirse la fuga no está establecido, por lo que no se sabe cuántas horas duró realmente el vertido de residuos de la granja hacia el río.
Tras el primer avisó del vertido, agentes de la patrulla verde de la Policía Local se desplazaron al paseo del Rato, concretamente al lugar donde el río se cruza con el llamado rego de Bosende, por donde bajaba el purín hasta ir a caer por la cascada que hay en el parque.
Los agentes encontraron el origen del vertido a dos kilómetros del río, en el depósito de purín de una granja, en el que localizaron una fisura.
El propietario de la ganadería estaba de vacaciones, pero un empleado se empleó, tras ser avisado por la Policía, en vaciar el depósito hasta el nivel de la fisura, para evitar que continuara saliendo el líquido contaminante.
La Policía Local puso el problema en conocimiento de la Confederación Hidrográfica, pero ayer no había constancia de la muerte de peces en el cauce del Rato como consecuencia de la llegada de cientos de litros de purín.
