Todo sobre la hierba del diablo

El estramonio es una planta tan común como mortífera. Crece en cualquier cuneta y si se ingiere o fuma puede resultar letal porque es muy difícil controlar la dosis de alcaloide, variable dependiendo de la planta y de la parte que se tome.

1. ¿Dónde nace y cómo se reconoce la planta?

También llamada hierba del diablo o revientavacas, la planta de estramonio (datura stramonium) se caracteriza por tener un fruto algo más grande que una nuez, de color verde o marrón, rodeado de pinchos. Sus flores son de gran tamaño y casi siempre blancas, aunque pueden encontrarse ejemplares con brotes violaceos. Crecen en cualquier parte, desde barrancos hasta parques, en descampados o en la ciudad, e incluso entre plantaciones como el maíz. Por ejemplo, en la actual época del año las riberas del embalse de Portomarín están totalmente repletas.

2. ¿En qué medida es mortal su veneno?

El estramonio contiene alcaloides como la antropina, la escopolamina o la hiosciamina, algunos presentes en otras drogas como la cocaína. El verdadero peligro de su veneno reside en que nunca se encuentra en la misma concentración. En algunas plantas el nivel tóxico es mínimo, mientras que en otras una pequeña cantidad puede resultar mortal. Si se hace una aproximación, una infusión hecha con 60 gramos de hojas resulta letal para un adulto, e incluso la miel fabricada con polen de flores de estramonio podría resultar tóxica. El estramonio es la especie responsable del mayor número de intoxicaciones de esta índole en el mundo. Los síntomas son sequedad de boca, mareos, convulsiones, alucinaciones, parálisis y, en el peor de los casos, el paciente entra en coma.

3. ¿Cuáles son sus usos médicos?

Como cualquier planta de estas características, su administración correcta puede tener efectos beneficiosos, aunque siempre bajo control de un laboratorio, con extrictos controles de seguridad y los correspondientes ensayos clínicos. Aplicada externamente se utiliza como anestésico, e internamente bloquea el sistema nervioso central para hacer sedaciones. La industria farmacéutica utiliza el estramonio para medicinas contra el dolor, gracias a la extracción de la hiosciamina. En oftalmología se emplea para dilatar la pupila y examinar a fondo el ojo, también forma parte de compuestos contra el asma, se utiliza para calmar el colon irritable e incluso como terapia frente al párkinson.

4. ¿Qué peligros entraña intentar drogarse?

Hay muchas páginas en internet donde se habla de los efectos psicotrópicos del estramonio, o que incluso venden brebajes que prometen contener este alcaloide, lo que puede resultar tentador para jóvenes ansiosos de probar algo nuevo. Se trata sin duda de un error, porque los efectos pueden ser mortíferos al desconocerse el índice de alcaloide que contiene cada planta. Fumadas sus hojas, bebidas en forma de infusión o masticadas, los efectos pueden durar varios días.

5. De Roma a las brujas de la Edad Media

Las primeras referencias que se tienen del estramonio se fechan en la antigua Roma, donde los participantes en las célebres bacanales lo tomaban para extasiarse y para aprovechar otra de sus teóricas virtudes, la afrodisíaca. En la Edad Media, formaba parte de los brebajes que utilizaban las brujas en sus ceremonias. Se sospecha que la creencia de que estas mujeres volaban con escobas se debe precisamente a los efectos alucinógenos del estramonio. En el Norte de África se consume como infusión y fumado como el hachís, o mezclado con éste; los indios de Norteamérica lo empleaban en sus rituales y para tratar las mordeduras de serpientes, y en México también era el ingrediente de los chamanes en sus ceremonias.

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