La iglesia lucense de San Antonio luce nueva imagen. Un jubilado de Melide, Xosé Manuel Broz, está pintando una composición, formada por nueve cuadros, que recoge las principales escenas de la vida de Jesús. Lo mejor de todo es que los figurantes son gente de a pie, de Lugo y de Melide, cuyas caras quedarán así inmortalizadas en esta iglesia.
la iglesia de San Antonio estaba escasa de ornamentación y de imágenes. Solo una Virgen, un Cristo crucificado y una imagen del patrón de la parroquia decoraban el interior del templo, diseñado por el arquitecto Fernández del Amo en 1961. El párroco de San Antonio, Alberto Leiva, pensó que ya era hora de imprimir un nuevo aire a la iglesia, que la hiciese más acogedora, y se le ocurrió encargar unas pinturas. «O presbiterio é moi austero, ten pouquiñas imaxes e pouca cor. Pensamos que debiamos enriquecelo para que a xente se sentise ben e facer dentro un espazo agradable para todos», explica el párroco.
El primer presupuesto lo encargó a una casa de Madrid y le pidieron entre 60.000 y 80.000 euros. Algo inalcanzable para la parroquia. Cuando ya