A rienda suelta en la cocina

Clientes probando tapas del Ave César; la tapa del Tosar, exhibida ante una terraza a reventar de gente, y Bao y Real, abriendo el concurso (Foto: J. Vázquez)
photo_camera Clientes probando tapas del Ave César; la tapa del Tosar, exhibida ante una terraza a reventar de gente, y Bao y Real, abriendo el concurso (Foto: J. Vázquez)

Fin de semana, septiembre, buen tiempo... Son las condiciones perfectas para salir a la calle y disfrutar de las posibilidades de ocio que ofrece la ciudad. Así lo creen el Concello y los cuarenta hosteleros de toda la ciudad que ayer pusieron en marcha la VII edición del concurso de tapas, la excusa ideal para que lucenses y turistas disfruten de los encantos gastronómicos de la capital.

El arranque del concurso fue tranquilo, pero el tapeo se animó por la noche y los hosteleros mantienen altas las expectativas para estos días y las semanas próximas. «Normalmente el primer día es el más flojo, sobre todo por las mañanas» comentaba el propietario del bar Tosar, Armando Romay.

Así, los propietarios de restaurantes, bares y mesones participantes, esperan que el certamen, que abrieron Antón Bao, teniente de alcalde, y Cheché Real, presidente de los hosteleros, tenga tanto éxito como en ediciones anteriores. «El año pasado llegamos a poner 100 tapas diarias» aseguraba uno de los trabajadores de la Taberna Daniel.

De este modo, la mayor parte de los hosteleros valoran muy positivamente esta iniciativa del Concello y la Asociación Provincial de Empresarios de la Hostelería, ya que, según dicen, consiguen llenar los locales durante estos días. Además, consideran que es una oportunidad para dar rienda suelta a la imaginación y mostrar sus mejores creaciones gastronómicas. Será por ello que la gran parte de los locales repite año tras año su participación en este certamen culinario.

Pese a esta valoración positiva generalizada, algún participante se muestra escéptico con el sistema de puntuación del concurso. Es el caso del establecimiento Ave César, que participa con la tapa Red Fire y considera que debería valorarse la creatividad de las tapas. «Presentar una tapa innovadora conlleva mucho trabajo previo» comentaba la propietaria del bar, que ya ha ganado el concurso en una ocasión.

Uno de los establecimientos habituales de este concurso, el restaurante Campos, se ha quedado fuera de esta edición. Sin embargo, ha decidido crear un concurso de tapas independiente con regalos que se sortearán entre los consumidores -dos cenas valoradas en 150 euros cada una-.

CONCURSOS
Premios para todos

Tanto los hosteleros como los consumidores optan a varios premios con su participación en el concurso. Así, los que pongan más de doce sellos entrarán en el sorteo de un viaje enológico valorado en 1.200 euros, diez entradas par el club termal del Gran Hotel Lugo, cuatro estancias de fin de semana en el hotel Puerta de San Pedro y una estancia para dos personas en un establecimiento de turismo rural.

Por su parte, los hosteleros ganadores del concurso recibirán placas conmemorativas e insercciones de publicidad gratuitas.

Precio

El importe de las tapas varía dependiendo del establecimiento. Así, en función de la elaboración, la tapa costará entre 1 y 3 euros.

El Concello se ha encargado directamente de la organización del concurso, por lo que estima un ahorro de 15.000 euros con respecto a las anteriores ediciones, cuando se contrataba a una empresa para la organización del certamen.

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