La banda que fue detenida hace una semana en Lugo por robar joyas en viviendas particulares, para venderlas posteriormente en establecimientos de compra-venta, quedó en libertad tras prestar declaración en el juzgado de instrucción número 2 de la capital.
A pesar de que ninguno de los ocho arrestados tiene domicilio conocido en España, y de que la Policía Nacional les incautó numerosos efectos robados, la jueza decretó la puesta en libertad de los detenidos, todos ellos de origen rumano.