En plena era de dependencia tecnológica, muchas parroquias de Lugo tienen problemas para llamar por teléfono a causa de la falta de cobertura, tanto de línea fija como de internet.
Carlos López es el pedáneo de la parroquia de Bacurín, situada a tan solo 14 kilómetros de la capital lucense. Para poder comunicarse, los vecinos tienen instalada en sus casas la tecnología Trac -Telefonía Rural de Acceso Celular-, con la que pueden tener un mínimo de comunicación con el exterior. A pesar de este primitivo sistema, Carlos López asegura que muchas veces los fijos funcionan mal, lo que se suma a una cobertura móvil casi inexistente. «Na maioría dos sitios os móbiles marcan unha raia de cobertura, como moito dúas», relata este vecino.Para intentar solucionar este problema de incomunicación, Carlos López instaló en su casa un sistema de telefonía por satélite que le proporciona servicio fijo y de internet. Sin embargo, reconoce que funciona peor que el Trac.
