¿Qué está pasando que de la noche a la mañana España se ha convertido en un hervidero de choris, dinero negro, corrupción y políticos cuya única ideología es el dinero?
Anteayer mismo, el alcalde de Chantada y tres concejales abandonaron el PP por discrepancias sobre quien debería tener el poder local del partido pero eso sí, anuncian que seguirán e incluso uno de ellos como diputado provincial, con sus prebendas, claro.
En O Courel, los concejales del PP al completo se van del partido para con otras siglas que se sacan de la manga y con un tránsfuga socialista que tampoco quiso dejar el poder, presentar una moción de censura y hacerse con la alcaldía.
En Láncara, los concejales de TeGa apoyaban al PSOE para gobernar pero ahora, cabreados, rompen el pacto y anuncian que aunque eran de Terra Galega, seguían conservando la militancia con los conservadores con los que presentan moción de censura y les dan la alcaldía aunque uno de los miembros de TeGa, o de lo que sea, ya anuncia que será el próximo candidato por el PP en este municipio.
En Castro de Rei, a principios de semana eran detenidos el alcalde, dos concejales socialistas y un concejal de TeGa y tras dos días en el calabozo —incluida la enorme pasada de la Policía llevando al alcalde a declarar con un despliegue de medios cual si fuese un terrorista— son puestos en libertad pero con cargos como prevaricación, cohecho o tráfico de influencias.
Mientras, el caso Gürtel amenaza de latrocinio a media España; Caixa Madrid se convierte en moneda de cambio de la pelea que mantienen por el poder Ruiz Gallardón y Esperanza Aguirre, y los del pelotazo de Santa Coloma son de momento la punta de un iceberg que puede seguir creciendo.
Pero entonces, ¿qué está pasando? ¿Es pues el ocaso de las ideologías? ¿Peligra la democracia? ¿Por qué los partidos políticos han permitido todo este enfango?
Son ellos, o sus líderes, quienes deben atajar por lo sano y hacer un examen real de la situación. Y sino que recuerden aquel viejo proverbio inglés que dice que, un tropezón puede prevenir una caída.
