«El departamento de contabilidad me dice que este año lo debemos aguantar. Podemos responder a las nóminas». El presidente de la Cámara de Comercio de Lugo, Eduardo Núñéz-Torrón, envío ayer este mensaje tranquilizador a los trabajadores de esta entidad, después de que Luis Abelleira, que dimitió como vocal del comité ejecutivo, asegurase que a partir de junio no habrá fondos suficientes para abonar los salarios a los 23 empleados.
Núñez-Torrón se decanta porque no se adopten medidas drásticas en materia de personal hasta que el Gobierno central apruebe la ley que debe regular los servicios que podrán prestar las cámaras de comercio.
